"Trabajamos para que pueda entrar en vigor a finales de este año o comienzos del que viene, aunque hay que tener en cuenta que no depende solo de nosotros ya que deberá informar Medio Ambiente y pasar por exposición pública". Con estas palabras respondió ayer el conseller de Ordenación del Territorio, Cristóbal Huguet, a las críticas expresadas por la patronal a raíz de la demora que acumula la tramitación de la Norma Territorial Transitoria (NTT) y, con ella, los "cambios puntuales" del articulado del Plan Territorial Insular que, según sostienen desde el Consell, tendrían que permitir agilizar determinadas inversiones y desarrollos urbanísticos en suelo rústico y zonas turísticas de la isla.
"Entiendo la inquietud expresada por las patronales, incluso podría considerar que son manifestaciones justificadas porque responden a unas expectativas que no se acaban de cumplir", reconoció Huguet, si bien defendió que el tiempo empleado es el requerido por una "tramitación compleja como ésta". "Si nos fijamos en otros expedientes administrativos de naturaleza similar, podríamos considerar que el plazo es incluso más breve", argumentó, a la vez que enfatizó que "la nueva norma, que está muy avanzada y de la que daremos un calendario la semana que viene, garantizará una mayor transparencia, agilidad y seguridad jurídica".
Advirtió, además, que a las dificultades de una tramitación como ésta habría que sumar los condicionantes añadidos por las nuevas leyes autonómicas en el ámbito turístico y urbanístico. "Hay que tener en cuenta también la incidencia que esta legislación ha tenido en el proceso", puntualizó. Huguet aclaró, por otra parte, que realizar cambios rápidos en esta materia "solo era posible a través de una tramitación parlamentaria, con rango de ley".
Sobre las críticas que apuntaban a que la demora se debía a que el Consell estaba realizando "un trabajo en profundidad", más propio de la revisión del PTI que de la modificación de aspectos puntuales para facilitar actuaciones inmediatas, Cristóbal Huguet se limitó a decir que "son muchas las cuestiones urgentes", entre ellas el complejo desarrollo de las áreas de reconversión territorial.
De forma más o menos velada, el conseller pidió paciencia a los empresarios. "Cuando hayamos aprobado la norma territorial transitoria todo el mundo querrá que se aplique de forma inmediata y no será fácil porque tendrán que adaptarse todos los planeamientos municipales", informó. Los constructores, de hecho, ya advertían a comienzos de semana que desde su aprobación hasta que se puedan realizar las primeras actuaciones de acuerdo con sus postulados podría pasar hasta un año.
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