Fiesta. La ciudad se volcó con la celebración de la fiesta de los marineros. La procesión fue seguida por un gran número de personas en tierra firme, pero también fueron muchas las embarcaciones que acompañaron a la imagen de la Virgen hasta la bahía para la ofrenda. - Jaume Fiol

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Tras las celebraciones en Maó y Fornells, ayer fue el turno de Ciutadella para rendir homenaje la Virgen del Carmen, patrona de la gente del mar.

Como marca la tradición, a las 19.30 horas se celebró una misa, presidida por el obispo Monseñor Salvador Giménez, en la Iglesia de Sant Miquel, un acto que contó, entre otras autoridades, con la presencia del alcalde de la ciudad, José Maria de Sintas, y el presidente del Consell insular, Santiago Tadeo, acompañados por el presidente de la Cofradía de Pescadores del municipio, Josep Caules.

En torno a las 20.20 horas, la imagen de la Virgen abandonó la iglesia al ritmo de "Esperanza Marinera", composición tradicional que interpretó la Banda Municipal de Ciutadella, dirigida por Joan Mesquida. Un buen número de personas se unieron a la procesión durante el trayecto hasta el puerto al compás de canciones como "Poble de Déu", "A la voz del capataz" o "Pescador de hombres".

Una vez en el muelle, los pescadores subieron a bordo de la embarcación "Vicenta I" a la Virgen mientras sonaba el himno español. Posteriormente, zarpó hacia la bocana del puerto para cumplir con la ofrenda floral en la bahía y rendir homenaje a los pescadores difuntos. De nuevo sobre tierra firme, la celebración continuó con un aperitivo en el Bastió del Governador del Ayuntamiento de Ciutadella.