Cruce. En la entrada a Alaior el proyecto casi no se retoca, debido a la peligrosidad del cruce. En la imagen, una colisión el pasado junio - Archivo

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El proyectista de la reforma de la Me-1 en su tramo de Maó a Alaior, Rodrigo del Pozo, y la técnica del departamento de carreteras del Consell, Ana Fernández, afirman que las rotondas previstas a nivel inferior no se pueden considerar exageradas o macrorotondas, como se han venido calificando por distintos colectivos durante el controvertido debate sobre dicho proyecto, sino que se encuentran al límite de lo permitido por la normativa para garantizar la seguridad del tráfico rodado.

Ambos ingenieros de Caminos, Canales y Puertos declararon ayer al "Menorca" que las medidas correctoras introducidas recogen las prescripciones de la Comisión balear de Medio Ambiente, y que éstas eran acordes con la adenda redactada por el propio Consell a partir de las alegaciones presentadas.

Según las previsiones de la Conselleria de Movilidad el proyecto constructivo de la reforma de este tramo de la Me-1 estará listo a principios de septiembre, y será el paso previo a la licitación de la obra. Si la tramitación avanza al ritmo esperado, los trabajos podrían comenzar a finales de año o principios de 2014.

Finalmente, entre Maó y Alaior se construirán cuatro rotondas (Biniaiet, Alcaidús-Rafal Rubí, La Agentina y entrada a Alaior) y se suprime la que se había proyectado inicialmente para dar acceso al Camí de Loreto. Los giros a la izquierda quedarán prohibidos, por su peligrosidad.

Las dimensiones de las rotondas se reducirán y los elementos resultantes serán aproximadamente del tamaño de la rotonda a nivel inferior que existe en el acceso actual a la playa de Son Bou, pero sin el viaducto, ya que el sistema, explicaron los técnicos, es diferente. En lugar de un puente será mediante cajones o marcos, señaló Del Pozo, quien asimismo recalcó que las rotondas serán incluso más pequeñas que la de Son Bou "porque tendrán solo un carril".

Ambos ingenieros insistieron en que los conductores no se encontrarán con las rotondas en superficie cuando circulen, ya que estarán debajo de la carretera, aprovechando la orografía del terreno.

Afirmaron que la rotonda del Camí de Loreto se diseñó inicialmente debido al tráfico pesado existente; ahora, con su supresión, los vehículos que quieran realizar giro deberán hacerlo con un recorrido adicional, en los enlaces de entrada a Alaior o el de La Argentina.

La intersección del acceso a Alaior por el polígono casi no se modifica, señalaron los técnicos, debido a su peligrosidad. Del Pozo y Fernández recordaron que en ocho años, entre 2005 y 2012, se han registrado 23 accidentes de tráfico en ese punto.

Ambos profesionales manifestaron que siempre partieron, en el diseño, del condicionante que supone la condición de Menorca como Reserva de Biosfera y sus limitaciones de territorio. Insistieron en que "nunca se ha buscado aumentar la velocidad y reducir el tiempo en recorrer la carretera, sino que se ha pretendido mejorar la seguridad y la calidad de conducción", una seguridad, subrayaron, que también será mayor para los usuarios de la red de caminos, como los ciclistas.