La operación queda ahora pendiente de que se tomen las muestras y de que el IEO emita un estudio sobre qué se debe hacer con los sedimentos - Archivo

TW
0

La Fiscalía de Balears considera «absolutamente necesario» realizar nuestos estudios de impacto ambiental «a la mayor brevedad posible» antes de «tomar la decisión sobre el lugar del depósito del material dragado» en el puerto de Maó. Esta decisión se adopta después de constatar la presencia de materiales contaminantes no inocuos en la zona a dragar y pone en cuestión el emplazamiento del vertido que ha venido manejando Autoridad Portuaria, en las inmediaciones de Cala Rafalet.

El estudio será realizado por el Instituto Español de Oceanografía (IEO), organismo que ya ha recibido el encargo de Autoridad Portuaria, en coordinación con la Unidad Técnica de la Fiscalía, cuyos profesionales han realizado el informe en que se fundamenta la decisión.

Esta situación obligará a tomar de nuevo muestras de los lodos y a renovar una serie de permisos, lo que supone repetir una buena parte del proceso previo. Los primeros informes de Autoridad Portuaria fueron realizados por una empresa privada y hace medio año el SEPRONA también tomó muestras a petición de la Fiscalía.

El informe de la Fiscalía, realizado a instancias de una denuncia del GOB que ha sido archivada, establece además que antes del dragado se deberán definir las medidas preventivas que el IEO considere necesarias para mitigar la afección en el ecosistema del vertido de los fangos.

El documento contempla como posibles medidas la «mejora de la calidad del sedimento antes del vertido» y la consideración de cuestiones temporales, para no alterar ciclos reproductivos de determinadas especies, y meteorológicas.

Lea el reportaje en KioskoyMás y My News