La continuidad del Consorcio de Disciplina en Suelo Rústico está en entredicho y el Plan Insular de Cooperación (PIC) de 2014 se encuentra en estos momentos «a cero», según declaró ayer el conseller de Cooperación, Juanjo Pons, al término de la reunión de la Comisión de Alcaldes, celebrada ayer en Es Castell.
El conseller y el presidente del gobierno insular, Santiago Tadeo, pusieron ayer sobre la mesa de la junta de alcaldes una serie de recortes, «ajustes», afirmaron, que afectan a algunos de los servicios mancomunados con los ayuntamientos y que hacen recaer en estos parte de la «presión económica que supone la sentencia de Cesgarden», señalaron desde el Consell.
Según el calendario de pagos pactado, en 2014 la institución debe abonar 1.369.993 euros, y el Ejecutivo insular ha empezado a pasar la factura a los alcaldes.
Así, la Conselleria de Cooperación modificará su aportación al Servicio de Protección Animal, que comprende los dos centros de acogida de animales abandonados, uno en Maó y otro en Ciutadella, que pasará a ser del 40 por ciento del coste, y no del 50 por ciento como hasta ahora. El 60 por ciento restante deberá correr a cargo de los ayuntamientos.
Lo mismo sucederá con el Servicio de Prevención y Extinción de Incendios, en el que se aplicará la proporción 40-60, y el Consell rebajará en un 10 por ciento su aportación actual al funcionamiento de los parques de bomberos.
Son reducciones que el conseller Juanjo Pons calificó de «necesarias para cuadrar el presupuesto de la Conselleria» y que afectan a competencias municipales, añadió.
En cuanto a uno de los servicios básicos para la actividad turística, la limpieza y mantenimiento de playas, el Consell mantendrá su aportación económica actual, ya que ésta es del 42 por ciento del coste de las actuaciones, frente al 58 por ciento que aportan los municipios.
No obstante, en la Comisión se acordó que los gastos generados por la oferta de sanitarios químicos en las playas urbanas también pasen a los ayuntamientos, en el caso de aquellas calas de las que todavía se ocupa el Consell.
La institución insular seguirá pagando los retretes químicos instalados en playas vírgenes, afirmó el conseller de Cooperación. Algo de lo que ya se ocupa desde hace dos años, cuando dejó de hacerlo la Demarcación de Costas.
Pons afirmó que la voluntad del Consell es mantener la partida para la cooperación internacional (Fons Menorquí de Cooperació y Fundación Vicente Ferrer), que este año es de 200.000 euros.
La partida destinada a los servicios mancomunados, de 1.350.000 euros para este ejercicio 2013 será la que se verá mermada, mientras que el PIC, que ha dispuesto de 1.250.000 euros este año, no tiene partida.
Respecto al Consorcio de Disciplina en Rústico -del que ya se dio de baja Ciutadella-, Pons manifestó que su coste es excesivo para los resultados que ofrece, «no ha actuado con prontitud», señaló. Su coste, indicó, es de 200.000 euros anuales.
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