El concejal de Servicios Generales del Ayuntamiento de Ciutadella, Pedro Gener, asegura que los apagones que estos días ha sufrido el Camí de Maó no se deben a ninguna decisión política de reducir el alumbrado de la zona para ahorrar dinero público. Se trata, explica el edil, de una avería.
«El Camí de Maó es una zona suficientemente oscura, no tenemos ninguna intención de apagar más farolas», defiende. Así se lo ha comunicado a la asociación de comerciantes de la zona, con quien ha manifestado su voluntad de colaborar. De hecho, Gener asegura que su plan es radicalmente opuesto a la reducción de la iluminación. Así, se está a la espera de cambiar las bombillas de las farolas de esta zona por otras con mayor potencia y menor consumo, más aún cuando la zona va a incrementar la presencia de pasajeros una vez los pasajeros de los autobuses, cuando paren en la estación provisional ubicada en la Vía Perimetral, usen el Camí de Maó para llegar al centro de la ciudad.
El problema de estos días, apunta Gener, es que las continuas lluvias han provocado fallos en el funcionamiento del cableado en la zona del Camí de Maó, la calle Sant Antoni Maria Claret y el Camí des Caragol. «Se sabe que algunos cables han tenido problemas con la humedad de este día, pero cuesta detectar el punto exacto en el que se produce el problema», comenta el edil.
El propio Gener añade que también se han detectado problemas estos días en el alumbrado de las urbanizaciones de Cala Blanca y Cala Bosc. Estos fallos, considera Gener, son un nuevo síntoma de que «el verdadero problema que tenemos en Ciutadella es que nuestra instalación eléctrica es nefasta, y es vergonzoso que no se haya invertido nada en mejorar esta infraestructura».
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