El Consell reunió a las empresas adscritas a PIME y CAEB para dar a conocer la modificación del proyecto - Javier Coll

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Las medidas correctoras introducidas en el proyecto de reforma de la carretera general en su tramo entre Alaior y Maó, según las prescripciones de la Comisión balear de Medio Ambiente, abren la puerta a que las constructoras de la Isla puedan optar a la ejecución de las obras de forma individual, es decir, sin necesidad de crear una Unión Temporal de Empresas (UTE).

Así lo señalan las asociaciones de empresas de la construcción de la Isla al resaltar que con el proyecto inicial, el trazado diseñado requería de una cualificación que las empresas de la Isla no disponen, de ahí que fuera necesaria una Unión Temporal de Empresas con constructoras de la Península que sí dispusieran de esta titulación. No cuentan con ella al no existir en la Isla suficiente infraestructura.

La modificación del proyecto y la reducción del impacto de las rotondas suprime así la necesidad de disponer de esta titulación y da vía libre a las empresas menorquinas a presentarse de forma individual, si así lo desean.

El delegado de la Asociación de Constructores de Balears en Menorca adscrita a CAEB, Francisco Cardona, indica que «esta opción se ha producido tras convertir los viaductos iniciales en cajones; la cualificación requerida es inferior, por lo que, prácticamente todas las que se dedican a obra pública pueden presentar su oferta libremente».

A pesar de que el ajuste del proyecto permite esta vía alternativa, las empresas tienen potestad para decidir si presentan su oferta individualmente o como UTE, ya sea con una empresa externa o entre empresas de la Isla.

El proyectista de la reforma de la general dio a conocer ayer a las patronales de CAEB y PIME la modificación del proyecto en base a las prescripciones de la Comisión balear de Medio Ambiente. La reunión contó, principalmente, con empresas constructoras interesadas en ejecutar el proyecto.

El presidente de la Asociación de Empresas de la Construcción y Promotores de Menorca, adscrita a PIME, Nicolás Bosch, confía en que la mano de obra para la ejecución del proyecto sea menorquina con el fin de reactivar el motor de la economía.