Muchas colas, sí, pero menos que otros años - Kika Triay

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Este sorteo de Navidad ha sido el más pobre en resultados que se recuerda en Menorca. Acostumbrada a conformarse con la pedrea, la Isla ha visto como el reparto de dividendos en reintegros y terminaciones era incluso más escaso que en años precedentes. Buena prueba de ello son las colas que, desde primera hora de la mañana, se formaron ayer frente a las seis administraciones de lotería. Igual de intensas para sus responsables, pero menos concurridas que en ejercicios precedentes.

Los números así lo atestiguan. Según el recuento realizado ayer, Menorca apenas ha recuperado uno de cada tres euros que invirtió. La Organización Nacional de Loterías y Apuestas (ONLAE) consignó 3.210.940 euros a la Isla, de los que solo retornará 1.021.000.

Nada que ver, por ejemplo, con los 2,5 millones calculados en 2009. Esta vez no se vendió siquiera ninguna participación de los premios en liza. En cambio, el año pasado Es Mercadal degustó parte del quinto premio, como ya había ocurrido en 2011, cuando la administración de la calle Bon Aire de Maó repartió diez décimos agraciados.

Esta vez la número 2 de Maó ha vuelto a ser, con diferencia, la que más suerte ha dado. A decir de su titular, desde ayer devolverá más de medio millón en terminaciones del segundo y tercer premio y en pedreas como las distribuidas entre el personal del centro penitenciario, los vendedores de Sa Plaça o S'Ullastrar de Sant Lluís.

En el polo opuesto se sitúa la número 3, de la calle del Carme, que solo ha contabilizado 22.000 euros, por 120.000 de la administración de Rovellada de Dalt, que vendió décimos con las dos últimas cifras del Gordo entre los clientes del Bar S'Avinguda de Sant Lluís y los trabajadores del hotel Milanos-Pingüinos de Son Bou. La administración de Es Castell ha dado 50.000 euros en pedreas, entre ellas 120 euros al décimo en el Ayuntamiento de Sant Lluís.

También en Ciutadella el sorteo ha sido menos generoso que otros años. La administración de la plaza de Artrutx estima que han tocado 200.000 euros, sobre todo en terminaciones de los tres primeros premios, una de ellas repartida a través del personal del centro de salud del Canal Salat. Los regentes de la administración de la avenida Constitució, sucesores de la recordada Valentina Fuxà, calculan que han dado 137.000 euros entre su clientela. Menos también que el año pasado, cuando se estrenaron en el negocio.