El líder del PSOE, Vicenç Tur, y el portavoz en el Consell, Joan Marqués.

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El PSOE hizo ayer público su posicionamiento oficial sobre el borrador de una Norma Territorial Transitoria (NTT) con «múltiples deficiencias» de la que critica que «carece de consenso ni de la oposición ni de los colectivos implicados», que no da la respuesta prometida a la crisis, hace que «Menorca ya no pueda decidir cuál es su modelo territorial» ante el «alud normativo autonómico», «carece de criterio general» y, con las llamadas legitimaciones, adolece de una «gran inseguridad jurídica».

El secretario general de los socialistas menorquines, Vicenç Tur, y el portavoz del partido en el Consell, Joan Marqués, lamentaron que «se hayan perdido tres años» y denunciaron que el articulado, que cambia 36 de los 66 artículos del Plan Territorial Insular (PTI), «es una modificación encubierta del modelo territorial de la Isla». Pese a todo, desde las filas socialistas, y solo si se produce «una modificación muy importante», tendieron la mano para alcanzar un consenso que permita aprobar alguna modificación a las que «no nos oponemos».

Entre esas vías de consenso, los socialistas apuntaron a las demandas que hacen los colectivos vinculados con la construcción en Menorca: «Pequeños cambios de usos en suelo rústico, aumentos en los volúmenes de casas de 'lloc' y facilitar la rehabilitación y reforma de edificaciones obsoletas: eso es lo que se pedía desde el sector».
En cambio, denunciaron desde el PSOE, «nos hemos encontrado con una norma con una falta absoluta de criterios generales que amplía zonas turísticas, flexibiliza mucho los usos en suelo rústico y abre la puerta a la desprotección de zonas emblemáticas». Los socialistas entendieron en conclusión que «abre demasiadas puertas».

La formación socialista denunció asimismo que en el proceso de elaboración, que entienden se podría haber resuelto con consenso en 2012, «se han cargado la comisión técnica asesora porque sus conclusiones no gustaban al equipo de gobierno».