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Prácticamente una enmienda a la totalidad. La Conselleria balear de Turismo ha remitido un contundente informe al Consell Insular mostrando su posición contraria a 13 de los 20 artículos del reglamento turístico aprobado inicialmente por la institución menorquina con un denominador común en sus objeciones, que se extralimita en sus potestades reglamentarias e invade las competencias propias del Govern.

Es el argumento que reitera una y otra vez para echar por tierra todo el articulado trascendente de un reglamento que desarrolla una Llei Turística que hace un año fue modificada precisamente con la supuesta intención de dar libertad al Consell para regular nuevas tipologías de alquiler turístico y recoger las especificidades del sector turístico menorquín.

El Govern entiende que los principios generales en materias como la información y la ordenación turística, competencias propias del Consell, «solo se podrán establecer por decreto del Govern, a quien corresponde su definición», tal y como figura en el citado informe, firmado por el conseller de Turismo, Jaime Martínez, el pasado 24 de abril.

El texto del Govern, un informe que el Consell tiene sobre la mesa desde el pasado 6 de mayo, va más allá y entiende que materias como la ordenación y planificación del sector turístico y la regulación y clasificación de las empresas y establecimientos es «una reserva competencial irrenunciable en favor del Govern, respecto de la cual no se tendrá porqué limitar a una regulación de principios generales, ya que supone la regulación de un sector económico esencial».