Es el primera condena en España por grabar imágenes de una película

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La defensa del joven de Sant Lluís condenado por grabar una película en el cine Ocimax de Maó presentará un recurso a la sentencia que le culpa de una falta contra la propiedad intelectual. Su abogado, Eladio Sintes, confirmó ayer a este periódico que recurriran ante la Audiencia Provincial el fallo, que le priva durante cuatro meses al acceso a cualquier cine, y le impone seis días de localización y la retirada del teléfono móvil con el que grabó imágenes de la película.

Este último punto es uno de los aspectos en los que se basará su recurso, pues el abogado defensor entiende que es «inconstitucional» que se prive al joven de su móvil ya que infringe el derecho a la libertad de comunicaciones reconocido por la Constitución.

Además, apelará al Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y la Declaración Universal de los Derechos Humanos con el mismo argumento.

El abogado expone que el joven no ha recuperado el móvil desde que se le requisó cuando fue detenido, tras ser pillado in fraganti por operarios de los cines mientras grababa la película «Gravity». Es más, según relata, ya ha cumplido la condena de cuatro meses sin poder entrar en ninguna sala, pues fue una medida cautelar que se le impuso hace un año en la fase de investigación del caso.

Por otro lado, alega que no tiene antecedentes por hechos similares. La defensa afirma que no usó un teléfono modificado (un iPhone 4), ya que la tapa blanca original ya la encontró cambiada por otra negra cuando compró el dispositivo en Menorcadillo.

Lo mismo sucede con la app que usó para grabar, Moviepro, que halló en el móvil cuando lo adquirió de segunda mano. El abogado añade que la acusación, que no se personó en el juicio, no aportó pruebas.