Entre dos aguas. Un sector del socialismo español presiona a Pedro Sánchez para que no pacte con Podemos, mientras el balear aboga por una alianza de izquierdas y que solvente la cuestión territorial. En la imagen, el líder del PSOE durante un mítin en Maó

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Lo pregonó en campaña, y ahora lo propone como solución a la ingobernabilidad que se cierne en España. El PSIB quiere exportar su 'fórmula' a la política estatal. Dirigentes del partido expresaron este lunes su confianza en que únicamente un pacto con formaciones afines, y que ponga sobre la mesa el debate territorial, puede desbloquear la situación creada tras las elecciones del domingo y evitar otras antes de marzo. «El que dé el paso gobernará», dijo el portavoz del Govern, el menorquín Marc Pons.

La secretaria general y presidenta del Govern, Francina Armengol, no asistió el lunes a la Ejecutiva federal en la que otros dirigentes pidieron a Pedro Sánchez que no pacte con Podemos ni intente «gobiernos pastiche». El PSIB, muy alejado de este sector, tiene su propia teoría. La apadrina Marc Pons, para quien hay que intentar una «fórmula a la balear».

Según el menorquín, primero Rajoy, y, si él no es capaz, Sánchez, tienen que tejer acuerdos con otros grupos. Y cree fundamental «abrir y cerrar el debate territorial». Se trataría de resolver este asunto reconociendo, «de algún modo», el «derecho a decidir», justo la condición que puso ayer Pablo Iglesias al PSOE para pactar.

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«Gobernar con el PP es ahora el escenario menos posible», sintonizó desde Menorca el secretario general, Vicenç Tur, quien recuerda que «corresponde a Rajoy demostrar la capacidad de liderazgo de la que presume y tratar de formar gobierno». «Sería un gran error», coincide Artur Bagur.

Tur, quien este sábado asistirá a la reunión de la Ejecutiva federal y el lunes, o martes, de la próxima semana convocará a su junta insular, cree que «se ha abierto un nuevo escenario, y que la comparación con comicios anteriores ya no cuenta. Esto es cosa de cuatro partidos». Por eso, pospone cualquier renovación de cargos al proceso congresual que se abrirá «dentro de unos meses».

El resultado de las elecciones, que convierte a Podemos en la segunda fuerza de Balears, no afectará tampoco al equilibrio interno del Govern, pero sí obligará a tener más en cuenta las propuestas del partido de Iglesias. Laura Camargo, portavoz de Podemos en el Parlament, reclamó ayer «más agilidad» al Govern para que «acelere las reformas pendientes».