La bicicleta es uno de los transportes más habituales entre los ciudadanos de Ciutadella | David Arquimbau

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El Ayuntamiento de Ciutadella volverá a poner en circulación 40 bicicletas procedentes del depósito municipal que se encontraban hasta hace poco tiempo en situación de abandono y de las que nadie ha reclamado su propiedad.

El Consistorio las pondrá a disposición de los trabajadores municipales de los departamentos de Servicios Sociales, Juventud, Protección Civil y Educación. Así pues, los funcionarios dispondrán de un transporte sostenible a la hora de desempeñar sus funciones diarias, acudir a reuniones, visitas o presentaciones. De hecho, cada departamento se hará cargo del mantenimiento de las bicicletas, que se entregarán en el mismo estado en el que se encontraron, sin reparación alguna antes de ser usadas, minimizando así el coste para las arcas municipales.

El concejal de Seguridad Ciudadana y Multas, Oriol Baradad, expone que «el reparto se hará en función de las peticiones que se reciban por parte de cada departamento» y asegura que ya tienen localizadas cerca de una decena de bicicletas más que a lo largo de los próximos meses podrían pasar a formar parte de la flota municipal y ponerse de nuevo en circulación.

En el caso de que la demanda de los servicios municipales no sea suficiente valoran la posibilidad de hacer una donación de las bicicletas restantes a alguna asociación o entidad que pueda sacarles partido. Sin embargo, reconocen que la tramitación para llevar a cabo una donación de este tipo puede ser larga y complicada.

Precisamente, están a la espera del último aval de servicios jurídicos para proceder a la entrega definitiva. Estudian si, antes de proceder a la entrega de las bicicletas, es necesaria la publicación en el BOIB, tal y como sucede en el caso de la recuperación de vehículos abandonados, o, por contra, puede iniciarse de manera inminente el proceso de adjudicación. Por su parte, la Policía ya ha emitido el pertinente informe técnico favorable. Se ha realizado una ficha para cada una de estas 40 bicis que permite identificarlas en todo momento. «Es un pena que la gente abandone las bicicletas en la calle», manifiesta Baradad, quien añade que han tenido que enviar directamente al desguace otras 40 bicicletas que se encontraban en un avanzado estado de deterioro y no podían volver a usarse. Tres de ellas se encontraban en las piscina municipal y dificultaban el aparcamiento de vehículos.