David Martínez, Cristina Gómez, Laura Camargo, Mateo Vich y Javier Ares, este domingo en el acto de Sant Lluís | Javier Coll

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«El trabajo institucional engulle hasta alejarte de donde veníamos, de la calle y de los movimientos populares». Así admitió Laura Camargo, portavoz de Podem en el Parlament, la ausencia de un contacto mayor con las bases del partido en encuentros como el organizado este domingo en Sant Lluís donde los cargos institucionales de la formación rindieron cuentas ante una docena de sus votantes en la Isla, presentes en el ayuntamiento. «Nuestras victorias son parciales, hasta ahora», resumió.

Camargo, como los consellers insulares, Cristina Gómez y Javier Ares, y el diputado balear David Martínez, realizaron un extenso repaso de las tareas desarrolladas a lo largo de este año y medio de gestión en sus respectivos cargos. La portavoz en el Parlament fue la única que introdujo alguna pincelada autocrítica al señalar que «esta primera rendición de cuentas es tardía, tendríamos que hacer muchas más para que nos tiréis de las orejas». Ni ella ni sus compañeros se refirieron en su exposición a la expulsión de sus compañeros, Xelo Huertas, Montserrat Seijas y Daniel Bachiller, acusados de incumplir el código ético del partido.

Dueña de un discurso inagotable, la dirigente se mostró orgullosa por hacer «virar» las políticas hacia la gente, como prueba que «el 70 % del presupuesto va para gasto social. Por eso es importante condicionar al PSOE porque, o se mueve con nosotros o acaba desgarrado».

Mostró el rechazo frontal de la formación al «monocultivo turístico» y su orgullo por las nuevas leyes de igualdad, de personas desaparecidas o la oficina de anticorrupción, al tiempo que planteó como reto llevar a una práctica real la ley de vivienda. «No debemos dejar de ser quiénes éramos», concluyó.

Cristina Gómez, consellera de Servicios Generales y Participación Ciudadana, destacó como gran logro la reapertura de la oferta pública en el Consell, con 3 plazas en 2016 y 10 en 2017, los pasos dados para lograr la transparencia prometida, la creación de la comisión de Greuges, el nuevo portal de transparencia con su código ético y los presupuestos participativos «que permitirán una auditoría ciudadana».

David Martínez explicó las intervenciones, preguntas y comparecencias en el Parlament, y Javier Ares se refirió a los pasos dados en la Reserva de la Biosfera «para soltar el lastre que había y llenar de contenido ese lema».