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El número de mujeres menorquinas que decidieron abortar en 2017 aumentó después de tres años consecutivos de descensos. Fueron un total de 129 las interrupciones voluntarias del embarazo (IVE), 122 practicadas en el Hospital Mateu Orfila y siete con residencia en la Isla que optaron por la intervención en otra comunidad autónoma. La cifra sigue por debajo del repunte en este tipo de intervenciones que se dio en 2012, con 129 interrupciones en Menorca y 12 en otras comunidades. Según los datos de la Conselleria de Salud, en la serie histórica de la última década, el número de abortos practicados en el hospital ha ido en aumento, de los 84 de 2008 a los 122 de 2017, con el pico de 129 en 2012.

Por zona básica de residencia es Maó el municipio que presenta mayor número de interrupciones, 42 derivadas del centro de salud Dalt Sant Joan y 26 del Verge del Toro, un 55,7 por ciento de las realizadas en la Isla y más del doble de las que se registran en Canal Salat, 33 el año pasado.

El ‘Mateu Orfila’ es uno de los diez centros sanitarios de Balears que proporciona los datos de interrupciones del embarazo para este informe, que indica que 3.177 mujeres abortaron en hospitales de Balears el año pasado, 2.450 en Mallorca, 567 en las Pitiusas y 122 en Menorca. La mayoría de esas intervenciones es por procedimiento químico o farmacológico, con un total de 2.098, aunque en otras 1.055 interrupciones se optó por el procedimiento quirúrgico. Por su nivel de seguridad los médicos intentan utilizar más la vía farmacológica. Así, si en 2011 se practicaron en las Islas 3.466 abortos y de éstos 2.972 quirúrgicos frente a 480 químicos y once combinados, ahora la tendencia se ha invertido, ya que en 2017 las IVE quirúrgicas bajaron a 1.055 en Balears.

El informe constata asimismo que más de un 60 por ciento de las mujeres se informan sobre la interrupción del embarazo en los centros de salud. La mayoría (un 70 %) son independientes económicamente, en situación laboral activa; un 50 por ciento conviven en pareja y hasta un 70 por ciento tiene ya otro hijo.

Otro dato es que un 31 por ciento de las mujeres que abortaron en 2017 repetía, ya que se había sometido con anterioridad a alguna interrupción voluntaria del embarazo.