Pons Vila realizó ayer, como es costumbre, su balance del periodo de sesiones. | Javier Coll

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La senadora de Menorca, Juana Francis Pons Vila (PP), dejará la política activa en cuanto acabe la actual legislatura. La decisión está meditada y tomada desde hace aproximadamente un año junto a su entorno más cercano, «es la noticia que hubiera querido leer mi madre (recientemente fallecida)». El motivo se resume en «la necesidad de un cambio, tiene que haber renovación, he cumplido mi ciclo porque no se debe vivir permanentemente de la política». Trasciende ahora, momento de su habitual balance del último periodo de sesiones, y ante la incertidumbre sobre si el Gobierno de Pedro Sánchez agotará o no la legislatura. «Espero que sea cuanto antes, pero no por mí, que trabajaré hasta el último minuto, sino por el bien de España, es un Gobierno nefasto».

Pons Vila acumula quince años en política activa, trayectoria que empezó como directora insular para pasar a ser consellera en la oposición. Luego ha ganado tres elecciones al cargo de senadora, en el que lleva desde 2011. De este periodo se lleva una «sensación agridulce», porque entiende que ha conseguido cosas «mis mociones han conllevado un millón de euros para Menorca» y porque en ocasiones ha recibido varapalos que considera no justificados por el hecho de mantener siempre su criterio a pesar de lo que marcara el partido a nivel local y autonómico. Notorio fue el caso de su votación sobre los sondeos petrolíferos, «el tiempo me ha dado la razón». Aún así, asegura que ha sido ajena a intrigas internas.