Imagen del centro sociosanitario de Santa Rita, en Ciutadella, gestionado por el Consell. | Gemma Andreu

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El envejecimiento de la población requiere un mayor gasto por parte de las administraciones. Cuanto más mayores y personas dependientes haya se necesitan más plazas geriátricas, centros de días, programas de atención... No se trata de un problema de futuro, sino que ya se vislumbra en el presente. Las listas de espera para obtener plaza en una residencia, las ampliaciones de diversos geriátricos de la Isla y los proyectos de construcción de nuevos centros y de mejora de los ya existentes son prueba de ello.

Como también lo es el incremento del gasto en atención a las personas mayores. En el caso del Consell, en 2018 dedicó 12,9 millones de euros a las partidas destinadas a la atención de las personas mayores y dependientes, según los datos de ejecución presupuestaria publicados en su portal de transparencia.

El gasto en personas mayores y dependendientes se ha incrementado año tras año. En 2012 el coste ascendía a 10,14 millones de euros, en 2015 y 2016 ya se acercaba a los 11 millones y en 2017 pasó de los 12 millones. El gasto en 2018 aumentó en 700.000 euros respecto al año anterior, lo que supone un incremento del 5,7 por ciento.

Si se compara el 2018, el último ejercicio íntegro del anterior mandato, con el de 2014, el último del PP en el gobierno, el aumento del gasto del Consell en estas partidas es de 2,54 millones, lo que se traduce en un incremento del 25 por ciento.

Más dinero en 2019

Y parece que el incremento irá a más este año, ya que para 2019 el presupuesto del Consell tiene asignada una partida de 13,62 millones. No obstante, tener la partida reservada no quiere decir que la gaste toda, ya que el presupuesto es la previsión de gasto. Por ejemplo, en el presupuesto de 2018 había 13,5 millones de euros para la atención de personas mayores y dependientes, y al final una vez liquidado el año el gasto fue de 12,9 millones.

Estos cerca de 13 millones gastados por el departamento de Bienestar del Consell el año pasado se dividen en tres programas. Un total de 4,5 millones fueron para promoción y atención a ancianos dependientes y envejecimiento activo. Otros 4,98 millones de euros para residencias y centros de día para personas con discapacidad; y 3,41 millones para residencias, centros de día y otros servicios asistenciales para ancianos.

Otras partidas

Otra partida del departamento de Bienestar Social del Consell que aumenta es la destinada a los centros de día para personas con discapacidad psíquica. En 2018 su coste fue de cerca de 440.000 euros. Son casi 66.000 euros más que en 2017, con un incremento del 17,7 por ciento. Si se compara con 2012, el aumento es de más de 170.000 euros, lo que supone un 63,6 por ciento más que seis años atrás.

En cambio, la partida para la atención de drogodependencias ha bajado en los últimos años. En 2018 se gastó 350.000 euros, 38.000 euros menos que el año anterior y entre 50.000 y 75.000 euros menos que en los años 2013, 2014 y 2015. Respecto a 2012 se trata de prácticamente la misma partida que seis años atrás.

Más dinero para la red de atención al inmigrante y para políticas de género

Otras partidas del departamento de Bienestar Social del Consell que se han incrementado son las destinadas a la red de atención al inmigrante y a las políticas de género e igualdad. La red de atención al inmigrante en 2018 tuvo un coste de 181.599 euros, lo que supone 13.585 euros más que el año anterior y 56.138 euros más que en 2012, con un incremento del 44,7 por ciento. La partida para política de genero en 2018 ascendió a 237.193 euros, 32.762 euros más que en 2017 y 93.435 euros más que seis años atrás, con un aumento del 65 por ciento respecto a 2012.