Tres de los medicamentos que menos se expenden ahora a causa de la escasez . | Gemma Andreu

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No hay desabastecimiento, advierten desde Cofarme, pero tampoco hay garantía alguna de encontrar en las farmacias medicamentos tan comunes como el ibuprofeno 400, que es el que se vende sin receta. También el paracetamol, otro de los analgésicos más utilizado, está temporalmente ausente en los aparadores de estos establecimientos.

El problema no es nuevo, pero se agrava al alcanzar a productos no específicos. El Adiro 100 mg, indicado para mejorar la circulación sanguínea y muy recetado, no ha recuperado el pulso de comercialización que tenía. Sigue llegando con escasez e insuficiencia para la demanda que registra. Otro tanto ocurre con el Apocar, un antiarrítmico de gran consumo y que llega en menos dosis de las que se demanda.

Otros productos como la Oftalmolosa Cusi Eritromedicina, un antibiótico para irritaciones oculares, tampoco era posible encontrarlo ni ayer ni en los últimos días en farmacias de Maó. En todos los casos, existen alternativas, hay otros productos con la misma composición o principios activos, según ratifican tanto desde la cooperativa como desde las propias farmacias, «si falta una refencia hay otras diez iguales», señala Guillermo Pons, gerente de Cofarme.

La inseguridad está en el suministro, generalmente son medicamentos que van llegando a Menorca, pero el volumen resulta escaso para abastecer la demanda. En ocasiones hay que esperar tres meses para acceder a determinadas marcas en la botica.

Cuota

El problema no es exclusivamente menorquín, afecta a todo el país, y de momento no es considerado grave. Entre los motivos que lo originan figura la cuota menorquina, que es el 0,15 por ciento del mercado nacional y los laboratorios sirven en función de ese porcentaje y por esa razón «siempre recibimos menos de la demanda», admite Pons.

La cooperativa tiene stock para treinta días, aunque ese no es el problema sino que no llegan con la regularidad requerida por médicos y pacientes. Meses atrás la Agencia Española del Medicamento cifraba la carencia en 386 presentaciones farmacológicas en España.