Imagen de archivo de la finca de Sa Marjal Nova, construida desde el año 1800.

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El pleno de la Comisión de Medio Ambiente dio este jueves el visto bueno a los expedientes para convertir las fincas de Binipati Nou y Sa Marjal Nova en hoteles rurales, ambas situadas en el término municipal de Ciutadella.

Esta resolución favorable, sin embargo, recoge una serie de interrogantes a nivel urbanístico planteados por el GOB, para que sea el Consell (como órgano competente) quien los resuelva durante la tramitación del interés general.

El presidente de la comisión, Antoni Alorda, explica que estas dudas ya habían sido trasladadas al Consell que, hasta ahora, no se había pronunciado al respecto. «Cuando el órgano sustantivo no responde la ley nos permite continuar con la tramitación y ceñirnos en la cuestión ambiental», expone Alorda y comenta que esta también ha sido el motivo del retraso de estos expedientes (son de 2017). «No somos un ejemplo de celeridad pero es cierto que hemos estado esperando una respuesta en este sentido», revela.

Desde el punto de vista medioambiental, en cambio, el dictamen ha sido más sencillo. «El objetivo de salvar posesiones donde pueda combinarse el uso turístico y el agrario para darle una vida socioeconómica entra dentro de las expectativas de la comisión», indica y recuerda que una vez pasado el filtro de medio ambiente, finalmente, es el Consell quien debe conceder el uso turístico. «Nos pronunciamos desde nuestra vertiente. No hemos entrado a resolver si se cumplen las condiciones urbanísticas porque no nos corresponde, pero recogemos las dudas del GOB y las trasladamos al Consell, que deberá despejarlas», concluye Alorda.