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La masa de agua subterránea de Migjorn Gran, que cubre una buena parte de la mitad sur de la Isla, dejará de ser considerada zona vulnerable a la contaminación por nitratos de origen agrario, en el caso de que se acabe aprobando con su redacción actual el proyecto de decreto que somete ahora a exposición pública la Dirección General de Recursos Hídricos del Govern. El documento contempla, en sentido contrario, que pasen a tener esta consideración las cuencas hidrográficas de los torrentes de Binimel·là y Mercadal. Se mantienen las masas de agua subterránea de Maó y Ciutadella.

El proyecto de normativa viene a actualizar, con unas medidas de control muy similares, el decreto de zonas vulnerables de 2010. En el conjunto de Balears, la superficie de los espacios con esta consideración aumenta en un 59 por ciento, mientras que en el caso de Menorca se produce una reducción, ya que mientras la masa de Migjorn Gran ocupa 111 kilómetros cuadrados, las dos cuencas hidrográficas suman 55,7 kilómetros. Así las cosas, en la Isla se consideran zona vulnerable 337,9 kilómetros cuadrados, algo más de la mitad de la superficie de Menorca, por los 393,2 del anterior decreto.

Los informes para la redacción del proyecto de decreto exponen que las tendencias de las masas de agua de la Isla, controladas con muestras en distintos puntos, «no son claras». Pese a ello, indica que en la masa de Ciutadella se ha producido en los últimos años un incremento de la presencia de nitratos, de una media histórica de 59,8 a 62,9 miligramos por litro. Por esto se considera que está en mal estado. En el caso de Maó, la cifra ha ido a menos (de 52 a 45,1), por lo que se estima en buen estado. En el caso de la masa de Migjorn Gran, todos los puntos de medición, excepto dos, están por debajo de 37,5 miligramos por litro, es decir, fuera de riesgo, por lo que se ha optado a excluirla del mapa de zonas vulnerables.

Los estudios previos recomendaban que se declarara zona vulnerable a los nitratos de origen agrario buena parte de la zona central del norte de la Isla, pero finalmente se ha optado por fijar la lupa y proteger únicamente las cuencas hidrográficas de dos torrentes. En las masas de Sa Roca y Addaia, el nivel de nitratos es bajo, como siempre ha sido, mientras que en Tirant y la zona Ferreries-Cavalleria las cifras son muy elevadas, 110 y 81 miligramos por litro respectivamente. Los documentos previos indican que en estos espacios solo hay un punto de control. En el caso concreto de Addaia, los valores rondan los parámetros de zona de riesgo, no obstante no se considera vulnerable por su escaso porcentaje de tierras dedicadas al uso agrícola.