Representantes del colectivo No Tòxic Menorca entregaron este jueves al alcalde de Maó, Héctor Pons, y la primera teniente de Alcaldía, Conxa Juanola, las 2.031 firmas que respaldan su manifiesto, por el que reclaman una producción de energía en la Isla cada vez más limpia y que, por tanto, no perjudique a la salud de sus ciudadanos. La recogida de apoyos continua abierta a través de la web de la entidad, donde se puede leer su posicionamiento.
Como portavoz de No Tòxic, Amadeu Bernadet explica que expusieron a los representantes del equipo de gobierno municipal que «los principios de protección de la salud deben ser los más importantes», por lo cual la producción de la central eléctrica del puerto de Maó «debe tener cada vez menos incidencia». Según Bernadet, del alcalde y la teniente de Alcaldía recibieron «buenas palabras» y su predisposición a avanzar hacia la descarbonización.
Para No Tòxic el Consistorio no puede desentenderse del tema energético «cuando la chimenea de la central está a solo 360 metros de su entrada, está dentro de la ciudad», con una altura de 62 metros que supera la de las Casas Consistoriales, «es muy significativo».
También lamentan que la información de la calidad del aire es proporcionada por Endesa, «es juez y parte», y que un dato tan relevante de los que recogen las estaciones existentes, como son las partículas PM2,5, solo se puede consultar mediante una página web confeccionada en el extranjero, «cuando es una de las sustancias con más incidencia en la salud».
Aunque satisfechos con el hecho de haber superado las 2.000 firmas, No Tòxic avisa de que «no pararemos» porque queda mucho por hacer en este asunto.
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