Vestíbulo y sala de espera del centro de salud Dalt Sant Joan de Maó en una imagen reciente. | Gemma Andreu

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De las 240 plazas de la convocatoria para cubrir las vacantes de médico de familia en la sanidad pública balear, el Servicio de Salud solo ha ofertado finalmente 191, entre las que no figura el centro de salud Dalt Sant Joan de Maó, a pesar de que tiene tres plazas cubiertas de forma interina o en comisión de servicios.

Ocho profesionales menorquines se plantean recurrir a la vía judicial para solventar las irregularidades que a su juicio se han dado en este proceso, después de que sendos recursos consecutivos de reposición hayan sido desestimados por la Conselleria balear de Salud.

La convocatoria fue publicada en mayo de 2018, tras ocho años de sequía opositora en esta categoría profesional, y contemplaba 191 plazas en turno libre y 49 de promoción interna, 240 en total. Dos años después, en mayo de 2020, el director general del Servicio de Salud, Juli Fuster, publica el resultado del concurso oposición, que aprueban 126 aspirantes del medio millar que había concurrido. Tambié publica entonces la relación de plazas que se ofrecen a las personas que han superado el proceso selectivo, que son 191 en vez de 240. De esas plazas, 141 (74 por ciento del total) están en Mallorca, 35 (18 por ciento) en Eivissa y las 15 restantes (8 por ciento) en Menorca.

Aparentemente, todos los aprobados tienen suficiente oferta donde elegir, en Menorca hay doce aprobados para las 15 plazas, pero los médicos menorquines aducen que las 191 plazas que se sacan a adjudicación coinciden con las del turno libre y, por tanto, no se han ofertado las 49 de promoción interna, a sabiendas de que hay tres aprobados en este turno y que tendrán preferencia en la elección de plaza en el paquete final y único de 191 que teóricamente pertenecían al turno libre.

En la desestimación del recurso, Salud argumenta la reducción de las 240 plazas iniciales a las 191 finales de la oferta a una cuestión de eficiencia que permitiese tanto el suficiente margen de elección a los aspirantes como una priorización de las necesidades de la administración sanitaria. Los ocho profesionales menorquines que presentaron el recurso no aceptan el pretendido argumento de la eficiencia

A partir de ese criterio, Salud identificó 205 plazas ocupadas por interinos en toda la comunidad, 17 de ellas en Menorca, pero ni siquiera esa cifra se va a cubrir en este proceso, puesto que se queda en las referidas 191.

La pretensión de los recurrentes es que se oferten las 240 plazas, tal como determina una sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Extremadura, «lo que se debe respetar es el número de plazas incluidas en la oferta de empleo público pero no hay una norma que imponga que solo puedan cubrirse exactamente los puestos singulares vacantes en los momentos de publicación de la oferta», señala la resolución judicial.

La escasa convocatoria de este tipo de plazas, una en ocho años, ofrece escasas opciones de movilidad, que es una de las demandas que exponen los médicos. Los aprobados saben que tendrán plazas, por cuanto son más que los aspirantes a las mismas, y son conscientes también de que por esa misma razón no ha habido más protestas, pero apelan a una cuestión de justicia. Por ello valoran iniciar la vía judicial una vez agotada la administrativa.