Trabajadores de la construcción levantando un muro de hormigón en las obras junto a la nueva escuela de Es Mercadal | Gemma Andreu

TW
1

La contratación temporal tan habitual hasta ahora en el sector servicios por su condición estacional desaparece con la reforma laboral aprobada la semana pasado por el Gobierno. Realmente, desaparece la modalidad del contrato por obra y servicio, que permitía contratar por horas y por días, pero se mantiene en casos estructurales (por circunstancias de producción) con un    máximo de un año y por sustitución de otro trabajador o circunstancias imprevisibles.     

Este es el punto que más afectará a Menorca «porque se pierde flexibilidad, será un problema en la economía estacional», comenta María García, secretaria general de PIME. Pero no solo afectará a la actividad turística. La industria del calzado, la construcción, el comercio, los talleres mecánicos y otros ramos también utilizan de forma habitual esta modalidad de contrato cuya eliminación no satisface en la patronal menorquina.

Una vez haya sido validada por el Congreso, donde es probable que sufra aún contratiempos, la ley da un plazo de tres meses para convertir los actuales contratos en fijos discontinuos o en indefinidos. O en despidos con su correspondiente indemnización, una opción que siempre ha estado y permanece. Desde PIME entienden que si ha habido tanta contratación temporal es por el coste del despido que, salvo excepciones, cuesta 33 días por año trabajado.

La reforma que ha liderado la ministra Yolanda Díaz persigue precisamente potenciar el contrato fijo discontinuo dado que muchos trabajadores con contrato laboral repiten con periodicidad de tiempo y funciones por el carácter estacional de la actividad.

Noticias relacionadas

Antonio Soria, secretario general de Comisiones Obreras, discrepa de ese punto de vista. «No ha de suponer una pérdida de contratación porque los empresarios nunca contratan más personal del que necesitan», declara. Desde una valoración global positiva de la nueva norma, entiende que la restricción a la contratación temporal ayudará a frenar «la rotación de trabajadores en distintas empresas para evitar hacerlos fijos, como está ocurriendo ahora», denuncia.   

Fraude

Soria destaca la eliminación del contrato de obra y servicio (una de las modalidades temporales) «porque era un fraude a todas luces», señala.

Desde el punto de vista sindical, considera importante la prevalencia que la ley otorga al convenio sectorial sobre el de empresa. «Si una opta por negociar uno propio ha de ser solo para mejorar las condiciones, nunca en caso inverso», explica.

El dirigente de CCOO precisa que muchos de los aspectos de la nueva ley vienen determinados por la jurisprudencia derivada de las denuncias laborales resueltas en sede judicial. En esa labor han intervenido los trabajadores y los sindicatos.

La ultraactividad es otro de los elementos de la reforma valorados por el reponsable sindical. Significa que los convenios no decaen al cumplir su vigencia, «ahora habrá más margen para negociar y continúa vivo hasta el nuevo. Era peligroso», comenta.