Casa señorial de Ca n’Olivar, en el centro de Ciutadella, uno de los bienes de la herencia De Olivar Despujol

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La mujer que reclama ser hija de José María de Olivar Despujol negocia con varios fondos de inversión americanos y europeos la venta de sus expectativas de derecho sobre la herencia que le correspondería en caso de que los tribunales acrediten la paternidad del citado personaje y, por tanto, su derecho a la millonaria herencia que se derivaría de ello.

«El problema es el tiempo», declara Fernando Osuna, abogado del bufete Osuna que lleva el caso, porque estos pleitos son largos. La demandante, que reside en Málaga, tiene 74 años y descendientes, prefiere cobrar y que, si finalmente cristaliza la operación de compraventa de esas expectativas, sea otro el que continúe el pleito.

La demanda fue presentada en noviembre del año pasado contra los dos sobrinos de De Olivar Despujol, fallecido en 2018 a los 99 años. El intento previo de alcanzar un acuerdo entre las dos partes resultó nulo.

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El primer paso judicial se dio el 14 de febrero con la celebración de una vistilla en la que el juez de Ciutadella determinó que se practiquen pruebas de ADN a la demandante y a los hermanos De Olivar Despujol.

Dos pleitos

Determinar la paternidad es el primer pleito, que es el que ha comenzado. Si se confima, deberá iniciar otro de reclamación de la herencia, al menos la legítima, que en Menorca, se sustancia en la cuarta parte del total. El bufete de abogados que lleva el caso incluye en el inventario millonario de la herencia casas señoriales, fincas, inmuebles, joyas, obras de arte y depósitos bancarios.

«El que tiene dinero aguanta un proceso de estas características, aunque sea lento», comenta Fernando Osuna. No es el caso de la demandante, que quiere dinero sin demoras y cree que las cartas manuscritas, el parecido físico, la coincidencia de residencia en Barcelona y el testimonio de testigos son pruebas a su favor.

La venta de expectativas de derechos cuenta con precedentes. Existe el riego de que la demandante pierda el pleito, pero, en la hipótesis más favorable, puede ser declarada heredera universal.