Una persona observa aviones en la pista del Aeropuerto de Menorca en el primer día del mes de julio. | David Arquimbau Sintes

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Menorca ha cerrado el mes de mayo con un previsible incremento del gasto turístico. El mayor flujo de visitantes ha hecho que en términos globales que el primer mes de la temporada se cierre con una cifra de desembolso turístico de 155,71 millones de euros, un nivel nunca antes visto en la Isla en un mes de mayo. Ese dato representa un incremento del 33,7 por ciento (39,3 millones de euros) en relación al año 2019, y es más de cinco veces superior si se la compara con mayo de 2021, pero encierra un indicador preocupante, el gasto medio del turista español ha empezado a descender.

Según los datos de la encuesta Egatur hechos públicos por el Institut d’Estadística de Balears (Ibestat), en el mes de mayo el gasto global de los turistas españoles se ha situado en 25,20 millones. El resultado es histórico, supone un incremento casi del 80 por ciento en relación a 2019, pero responde al aumento de visitantes y no a un incremento de su desembolso. Si observamos el gasto medio diario, se ha situado en mayo de 2022 en 104,25 euros, son casi diez euros menos al día que antes de la pandemia, un descenso del 8,7 por ciento que cobra más relevancia si se tiene en cuenta el actual contexto de altísima inflación. Parece que el turismo nacional ha empezado a poner el freno.

En cambio, el gasto turístico de los extranjeros, todo el relacionado con la organización y desarrollo de sus vacaciones en la Isla, ha crecido tanto en números absolutos, gracias al aumento de su presencia, como a nivel individual, en el coeficiente de gasto medio por jornada, que se alza este mes de mayo hasta los 163,22 euros, un aumento del cinco por ciento en relación al mismo mes del año previo a la pandemia.

Ello ha permitido que el gasto medio diario del global de los visitantes, independientemente de su procedencia, haya aumentado un 5,2 por ciento y se sitúe en el primer mes de la campaña turística en los 149,53 euros. La suma de todos los gastos individuales, esos 155,71 millones de euros, no crece al mismo ritmo que el número de visitantes, que se elevó en mayo un 28,7 por ciento en relación a 2019.