Los militares, en la marcha realizada este martes por la costa norte.

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Ejercicio de liderazgo para el oficial al mando del grupo, reconocimiento del terreno y cuidado de la naturaleza son el conjunto de objetivos con el que una sección del Regimiento de Infantería Palma 47, con sede en la capital balear, se ha desplazado esta semana a Menorca en una de sus actividades habituales que les lleva a recorrer todas las islas del Archipiélago.

En esta ocasión, la sección del batallón Filipinas está formada por 20 militares profesionales que atracaron en Ciutadella procedentes de Alcúdia el lunes por la mañana.

La sección realizaba este martes el primer recorrido de reconocimiento en una marcha que les llevó desde las inmediaciones de la playa de Es Grau, en pleno parque natural, hasta el Arenal d’en Castell, en dos tandas de mañana y tarde.

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Soldados y mandos realizaron un conocimiento geográfico del tramo establecido con especial atención a las zonas más sensibles que pueden degradarse por la presencia humana. La marcha, que forma parte de las maniobras que realiza este regimiento, está dirigida principalmente a contribuir a la preservación del Camí de Cavalls, una misión adaptada a la realidad y necesidades actuales.

La sección del batallón Filipinas, a su paso por Cala Tortuga

Es por ello que los militares profesionales realizan el ejercicio con el uniforme de campaña y el equipo correspondiente. Aprovechan el recorrido para actualizar la topografía del terreno y realizan una vigilancia en aras a la protección del medio ambiente.

Los militares se han alojado en la base de San Isidro y este miércoles tienen previsto su regreso al acuartelamiento de Palma.