El movimiento sísmico ha dejado más de 40.000 muertos | Reuters

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Tras el terremoto de Siria y Turquía la organización católica, Caritas Menorca, está apoyando el plan de emergencia de Caritas Internationalis para ayudar a las personas afectadas. El movimiento sísmico del 6 de febrero dejó más de 40.000 víctimas mortales y más de un millón de personas viven ahora desplazadas en refugios o trasladadas a otras provincias.

El trabajo de Caritas en Siria y Turquía se centra en intervenciones de primera respuesta y en fase de evaluación de daños e identificación de necesidades. Se han habilitado parroquias, escuelas y hospitales católicos para acoger a familias afectadas y se ha movilizado personal y voluntarios de Damasco y Homs para ayudar en lo necesario. También se ha activado un equipo de emergencia de Caritas Líbano. Desde Caritas Menorca se han enviado 3.000 euros de fondos propios para distribuir productos de primera necesidad como agua, leche infantil, comida, mantas y ropa de abrigo.