Las dos estaciones cumplen con los servicios mínimos desde hace dos semanas. | Gemma Andreu

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Unos 600 vehículos con cita asignada para pasar la revisión en las dos estaciones de la Inspección Técnica de Vehículos en Maó y Ciutadella se han quedado sin hacerlo debido a la huelga indefinida convocada por los trabajadores de ambas plantas, iniciada el pasado 23 de mayo.

Considerando que los servicios mínimos decretados por el Consell y gestionados por la empresa concesionaria, Rheiland Certio, suponen que aproximadamente la mitad de la plantilla no trabaje en cada uno de los turnos, se calcula que en Maó, entre 50 y 60 vehículos se quedan sin la cita a diario. En Ciutadella la cifra se sitúa entre los 30 y 40 por jornada.

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Los dos primeros días de la huelga apenas tuvieron repercusión puesto que había pocas citas concedidas ya que las dos estaciones se sometían al control anual de la ENAC, el Organismo Nacional de Acreditación designado por el Gobierno que regula el funcionamiento de las plantas. Fue a partir del viernes, día 26 cuando los efectos resultaron más significativos, y desde entonces han transcurrido ya siete días lectivos.

Los conductores que acuden a la revisión son informados del estado de huelga del personal y, salvo los que sí entran en los servicios mínimos, obtienen una nueva cita con larga demora. De hecho, la web de reservas de Certio permite reservar nuevas horas al menos a un año vista, posiblemente porque la empresa las tiene cerradas hasta que se resuelva el conflicto.

Los trabajadores, que consideran abusivos los servicios mínimos, deben atender a los vehículos prioritarios (ambulancias, bomberos, policía, sanitarios) y de transporte de mercancías, obras, servicios y construcciones. Los servicios mínimos también contemplan que sean atendidos los vehículos a los que les haya caducado la ITV o les caduque durante la huelga, pero en este caso, al ser solo la mitad del personal el que presta el servicio, al menos entre el 40 y el 50 por ciento de los que tienen la cita se quedan sin poder pasarla en el día asignado.

El apunte

Devolver la gratificación voluntaria no convence

El acuerdo entre los trabajadores y Certio no llega después de dos semanas de paro indefinido y el Consell, que actúa en la mediación, y es el titular del servicio, omite cualquier declaración.

La empresa propuso a los trabajadores la semana anterior a la huelga recuperar la gratificación voluntaria que les había sido retirada con anterioridad, considerando que en marzo, con el convenio, ya se les había aplicado una subida salarial.Además, a partir de este paso se establecía un calendario de negociación pero como los operarios rechazaron esta propuesta y mantuvieron la convocatoria de huelga, Certio ya no le vio sentido a acudir al Tamib.

La empresa reiteró esta reimplantación de la gratificación voluntaria la semana pasada pero no propuso ningún aumento, en contra de lo informado por los trabajadores.

La gratificación voluntaria que ahora ofrece Certio es solo recuperar lo que antes les había retirado, interpretan algunos de ellos, sin considerar la naturaleza de este incentivo «voluntario», de ahí que por ahora no les convenza para desconvocar el paro.
Los empleados, como el Consell, han decidido no hacer declaraciones sobre la situación.