El conseller del Mar al fondo, el menorquín Juan Manuel Lafuente, se reunió con los recién asociados. | CAIB

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Con la firme voluntad de proteger las emblemáticas casetes de vorera y poner en valor el significado cultural y patrimonial que tienen estas edificaciones construidas, en su gran mayoría, hace más de un siglo al borde del mar se ha constituido la asociación Casetes de Vorera de Menorca. Al frente de la entidad, que se erigió en agosto, están Rita Pabst como presidenta y Gonçal Seguí como secretario.

«Queremos proteger todo tipo de casetes de vorera, especialmente las históricas», remarca Pabst, que adelanta que, de momento, conforman la asociación una docena de usuarios. Con la intención de cumplir sus objetivos, ya han tenido un encuentro con el conseller del Mar del Govern balear, el menorquín Juan Manuel Lafuente. La reunión se celebró ayer y los recién asociados salieron con «buenas sensaciones».

Seguridad jurídica

Lafuente se comprometió a ejecutar la Proposición No de Ley (PNL) aprobada en el Parlament durante la legislatura pasada para garantizar la protección y seguridad jurídica de las construcciones marineras que, en los últimos años, se han topado con órdenes de demolición y desestimaciones de concesiones por parte de Costas.

«Las casetes de vorera son testimonio de nuestro pasado, reflejo de nuestras raíces y simbolizan la unión entre nuestra gente y el mar», subrayó el conseller del Mar, que añadió que «es esencial que protejamos los pilares que han construido nuestra identidad, preservarlas no es solo rescatar edificaciones, sino también reafirmar nuestra esencia».

Juan Manuel Lafuente adelantó que, en coordinación con los Consells y los Ayuntamientos, se está elaborando un catálogo para registrar debidamente estas edificaciones y garantizar su mantenimiento. Además de las casetes de vorera, defendió la protección de otras estructuras tradicionales vinculadas al paisaje menorquín y balear.