Aumenta la espera para visitar a un especialista en el hospital Mateu Orfila: ya es de tres meses

A fecha 31 de diciembre, 7.139 personas aguardaban la visita redirigida al médico de su patología concreta en el Hospital Mateu Orfila, cifra que se ha incrementado en 310 pacientes más en las primeras tres semanas de este año. Aunque la cifra global se ha reducido en 240 personas respecto al final de 2022, el tiempo medio de espera ha subido otros 13 días, pasando de 80 a 93. Además, entre los enfermos que aguardan al especialista, 3.272 llevan más de dos meses esperando la consulta. No se ha podido recuperar, por tanto, el decreto de garantía de demora de hace 4 años que garantizaba unos tiempos máximos de respuesta del sistema sanitario, de 60 días para consultas médicas y 180 para intervenciones.

Entre las especialidades actualizadas en el portal de la sanidad pública balear -no lo están los datos de medicina interna o digestiva, entre otros, en los que existe falta de profesionales médicos-, destacan por su retraso en conceder la cita las de cirugía oral y maxilofacial, que es la que presenta la media más elevada, con más de 9 meses de espera (277 días) frente a los 169 que presentaba hace un año.

Las visitas al urólogo también se hacen de rogar por su elevada    demora en los últimos doce meses en los que se ha pasado de 47 días    de media a 80.Son en la actualidad 490 los pacientes que aguardan el reconocimiento del especialista, casi 200 más que el año anterior. Otro tanto sucede con los de traumatología, que ascienden a 765 en lista de espera, con una media de 35 días de demora para ser atendidos.

Los datos del portal de transparencia inciden, igualmente, en el destacado incremento de la lista de espera en obstetricia y ginecología. Si a final de 2022 las cifras eran insignificantes, un año después las citas se dan con una demora media de 36 días y son 477 las mujeres que todavía están pendientes de ser visitadas, como refleja la estadística actualizada del sistema de salud en Menorca.

Traumatología, con 765, y dermatología    con 747 son los que tienen el número mayor de pacientes en espera, lo que no concuerda con el tiempo de demora medio que está situado en ambos casos en 35 días, puesto que se conocen casos en dermatología en los que la demora supera los ocho meses.

Por contra, es oftalmología la especialidad que más mejora su situación asistencial. Si hace un año el tiempo de espera para recibir una cita era de 73 días, ahora se ha situado en 19. Más del triple de pacientes del año pasado han desaparecido ya de las listas que copaban 1.025 personas.

Las dos especialidades difundidas que mejoran levemente su media de espera son las de otorrinolaringología y cirugía general digestiva.

Espera quirúrgica

En cuanto a las listas de espera quirúrgica se    incrementan en casi 500 personas respecto a finales de 2022, con 1.664 pacientes que están pendientes de pasar por el quirófano. La demora media ha subido ligeramente hasta los 78 días, aunque a fecha 19 de enero solo son 52 las personas que llevan más de medio año aguardando la intervención.

Todas las especialidades    con datos actualizados aumentan el tiempo medio de espera, salvo las de traumatología y urología que    lo disminuyen.

Entre la información que sirve el IB-Salut, la demora media    para acudir al quirófano en oftalmología está en 81 días, que se explica por la reducción en la lista de espera de las visitas que acaban derivando en intervención.

Los pacientes de cirugía general digestiva han de aguardar una media de 74 días para ser operados, 17 más que hace un año, mientras que la de cirugía oral y maxilofacial se aproxima al año, con 310 días de media, muy por encima de la general.

La consellera de Salud, Manuela García, anunció a mediados del pasado noviembre una inversión de 22 millones de euros en un plan de choque para reducir las listas de espera en Balears y recuperar el decreto de garantía de demora interrumpido hace cuatro años. El Servicio de Salud dispone este año de un total de 2.275 millones    de euros, casi la mitad para los gastos de los profesionales.