Vídeo de la campaña «Menorca acollidora» impulsada por el Consell de Menorca.

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En estos momentos, hasta 23 menores de la Isla se encuentran en situación de desprotección a la espera de poder entrar a formar parte de una familia de acogida. A su vez, tan solo 8 jóvenes menorquines están recibiendo la atención de una familia de acogida, habiendo otros 24 que se encuentran bajo el amparo de una familia de acogida extensa, es decir, al cuidado de algún miembro de su familia de origen que no sean sus padres.

Dada la importancia de encontrar un hogar adecuado en el que estos menores puedan desarrollar todo su potencial de manera satisfactoria, el departamento de Bienestar Social del Consell presenta la campaña «Menorca acollidora», cuyo objetivo es incentivar el acogimiento familiar y evitar que los menores tengan que llegar a la casa de la infancia y entren directamente en un hogar.

Cualquiera puede acoger

En cuanto a los requisitos y condiciones para poder acoger a un menor, lo cierto es que cualquier persona puede hacerlo independientemente de su situación familiar: tanto si vive sola como si está en pareja, tenga hijos o no. Aquellas personas interesadas en acoger tan solo tienen que pedir cita al Servicio Insular de Familia (SIF) del Consell a través de los canales habilitados y, a continuación, presentar una solicitud con toda la documentación requerida por la administración.

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El Consell ha presentado este jueves la campaña «Menorca acollidora». | Gemma Andreu

Poco después, se procederá a realizar una entrevista y una valoración psicosocial del solicitante para evaluar el entorno en el que se encontraría el menor. Finalmente, tan solo sería necesario realizar un curso de formación específica de diez horas.

Compensaciones y apoyo técnico

Una vez completado todo el proceso, la familia de acogida es ajustada a un perfil que puede ser temporal, permanente, especializado o urgente. En el caso del primero, la duración está limitada a dos años y se considera transitorio, previendo una reinserción en su familia de origen. En el segundo, se prevé una duración superior a los dos años, por lo que puede extenderse hasta la mayoría de edad del menor si existen pocas o nulas opciones de que este se reintegre con su familia de origen.

Por último, estarían la acogida urgente y la especializada. Estos dos perfiles están reservados para adultos relacionados con el mundo de la educación, ya sean docentes, pedagogos, psicólogos y similares, o personas que hayan tenido alguna experiencia previa como familia de acogida. De este modo, la familia de acogida de urgencia está pensada para aquellas familias con una disponibilidad total para recibir a bebés y niños pequeños hasta los 6 años, mientras que las especializadas se centran en atender a menores con necesidades o circunstancias especiales: grupos de hermanos, adolescentes con problemas de conducta, de salud, discapacitados...

Así pues, cada familia de acogida contará también con el apoyo técnico de psicólogos y educadores sociales, además de una compensación económica estipulada por el Consell que varía según el perfil de la correspondiente familia de acogida: para aquellas que acojan a un solo menor, la cuantía está fijada en 441,62 euros. Si acoge a dos o más menores, esta se reduce a 395,62 euros por menor. En cambio, para las familias de acogida especializada y de urgencia asciende a los 945,48 euros.