Andamios dentro y fuera del cuartel de Ciutadella, con las obras en marcha desde enero. | Josep Bagur Gomila

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El ostensible deterioro del cuartel de la Guardia Civil de Ciutadella con paredes desconchadas en el edificio y espacios interiores degradados, está siendo corregido mediante una obra general de rehabilitación iniciada hace poco más de un mes que permitirá mejorar la imagen vetusta y desangelada que ofrece el edificio desde el exterior.

Los andamios que empiezan a rodear la construcción situada en la Avinguda Ciutat d’Alguer, son visibles, igual que el trabajo que realizan los operarios para la renovación de la terraza superior sobre la que también intervienen.

La obra, que dispone de un plazo de ejecución de siete meses, por lo que probablemente se prolongarán hasta el último trimestre del año, contempla la rehabilitación de todo el edificio, las zonas ajardinadas y las intervenciones necesarias para dotarlo de eficiencia energética, principal motivo de su inclusión en los proyectos del Ministerio del Interior, además de otras mejoras de adecuación.

Se trata de unos trabajos programados por la Sociedad de Infraestructuras y Equipamientos Penitenciarios de la Seguridad del Estado (Siepse), a mediados de 2022. Estaba previsto que las obras arrancasen durante el segundo semestre del pasado año, pero finalmente lo han hecho en el inicio de este 2024.

La intervención cuenta con una dotación presupuestaria de 1,2 millones de euros que se financia con cargo a los fondos Next Generation, y está encuadrada en el nuevo Plan de Transición Energética de la Administración General del Estado. Por tanto, debe incluir el aislamiento de todas las dependencias del acuartelamiento.

El cuartel de la Guardia Civil de Ciutadella dispone de 24 pabellones para que pueda residir parte de la plantilla de agentes allí destinados junto a sus familias. Sin embargo, seis de esos pabellones no estaban operativos debido al estado obsoleto de la instalación eléctrica que afectaba a parte del edificio. A finales de 2022, el Consell aprobó una ayuda directa a la Guardia Civil de 45.000 euros para acometer la obra necesaria que permitiera recuperar estos inmuebles y que pudieran ser utilizados por los guardias civiles.

Los pabellones también manifiestan deterioro, como el exterior del edificio debido a la antigüedad de las instalaciones de suministros. Las obras para mejorar la eficiencia energética que se están desarrollando ahora ayudarán a restablecer las prestaciones originales de las viviendas y del resto de dependencias del acuartelamiento.