Los "Conciertos de Villa Jardín" han cumplido ya sus 15 años, con vitalidad admirable y atractiva, habiendo ofrecido tres noches sugestivas de música clásica en la triple variedad instrumental de violonchelos, dúo de piano, y guitarra.
Por decimoquinta vez, el delicioso jardín de la villa dejó gustosamente su silencio contemplativo para convertirse en auditorio de melodías y armonías que penetraban en sus palmeras, y se irradiaban al exterior.
El ciclo de los conciertos ha sido el más tradicional: tres actuaciones en tres noches, del viernes al domingo, efectuadas todas en Villa Jardín, la ubicación en la que nacieron los conciertos hace 15 años.
La serie comenzó este año con regusto de violonchelo, uno de los más caracterizados instrumentos de cuerda. Diez alumnos del Conservatorio Superior de Música de Aragón, formando un excelente Ensemble, confirmaron la capacidad del instrumento para sintetizar adecuadamente complejidades de la restante familia de cuerda.
El Ensemble demostró gran conjunción en su diversificación de sonidos y contrastes. Evidenció notable dominio técnico, y sentido de la expresión, concentración y esmero.
Subrayó la diferencia estilística de las obras programadas, manifiesta especialmente en la interpretación de la "Suite Holberg", de E. Grieg, y la "Bachiana Brasileira", de H. Villalobos.
Dos jóvenes hermanos, Víctor y Luis del Valle, alumnos de la prestigiosa Escuela Superior de Música Reina Sofía, de Madrid, demostraron la extraordinaria capacidad de sonoridad y armonía del piano pulsado a dúo, pero sólo cuando existe auténtica compenetración de los intérpretes, en dominio de digitación, fluidez, y expresividad, a veces entusiasta, otras, de finura. Los hermanos del Valle poseen esas características, evidenciadas en la versión de las obras programadas.
En la de la "Sinfonía n.5, en Do menor, op. 67", de L. Van Beethoven (transcripción de Hugo Ulrico) los intérpretes desgranaron apropiadamente el ritmo y la vivacidad de los movimientos, intensificando, quizás excesivamente, el volumen en determinados fortes, cuidaron con exquisitez el desarrollo de la "Fantasía en Fa menor, D.940", de Fr. Schubert, e imprimieron excelente énfasis rítmico a la exposición de dos danzas, de M. Falla.
Clausuró muy brillantemente la serie de la 15 edición la destacada concertista de guitarra Hang Nguyen, confirmando plenamente su dominio en toda la gama de sonoridad del instrumento, su pulcritud y nitidez de expresividad, el detallismo de su interpretación, que comprendió composiciones de autores tan distintos, como Gaspar Sanz, Fernando Sor, y Celedonio Romero, entre otros, desde el siglo 17 al veinte, aludiendo también al folclore tradicional de su Vietnam nativo. Dos jóvenes estudiantes de piano, alumnos de Luba Kletsova, Marcel Pons Benejam y Patricia Romero Barber, intervinieron brevemente en el acto, confirmando la voluntad promocional de FIDAH
Los tres días el público acudió como en años anteriores, incluso en la noche del partido entre España y Paraguay, disfrutó de la música y del entorno sugestivo, aplaudiendo con intensidad e insistencia a todos los intérpretes.
Organizados muy eficientemente por FIDAH, contando con la colaboración especial del Ayuntamiento de Sant Lluís, y de "S'Auba", los conciertos prestigian a dicha población y son referente obligado de aficionados.
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