Uno de los locutorios tenía un ordenador sin licencias y el otro seis terminales

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Dos propietarios de dos locutorios de Ciutadella serán juzgados el próximo lunes en las dependencias del juzgado social, acusados de un delito contra la propiedad intelectual por el alquiler pirata de ordenadores que no contaban con las licencias originales de los servidores con los que operaban.

Los inculpados son un hombre de nacionalidad colombiana, propietario de un local situado en la calle Degolladors, mientras que la otra acusada es una mujer, de nacionalidad polaca, que posee el negocio en el Paseo Sindicato, de la misma ciudad de poniente.

Ambos se enfrentarán a una pena de dos años y tres meses de prisión, condena que solicita el Ministerio Fiscal. En el caso de que fueran declarados culpables también deberán abonar una multa durante 18 meses a razón de 6 euros diarios, según la petición del jurisconsulto. Los dos juicios se celebrarán por separado aunque el delito por el que se les acusa es el mismo y corresponde a los mismos hechos que fueron denunciados en septiembre de 2016.

La Guardia Civil realizó una redada el día 19 de aquel mes en varios locutorios de la Isla para detectar la comisión de posibles delitos por comercios ilícitos o estar en posesión de la documentación correcta para la actividad que ofrecen. Fueron imputados algunos otros ese mismo día, según ha podido saber este diario, también por delitos contra la propiedad intelectual, aunque el juez del Juzgado de Instrucción número 2 de Ciutadella los sobreseyó.

Los dos acusados deberán responder por haber utilizado un ordenador, en el caso del local de la calle Degollador, y seis en el del Paseo Sindicato con la intención de procurarse un beneficio ilícito. Según la acusación, a través de ellos realizaban una actividad comercial mediante el alquiler de los equipos informáticos para la conexión tarifada a internet. Lo hacían sin contar con las correspondientes pegatinas originales de Microsoft autorizando las instalaciones de los sistemas operativos. También carecían de las licencias de software de Windows y Office para la instalación y el uso de los mismos.

En el caso de la propietaria del local de Sindicato, la defensa argumenta que recibió el locutorio en traspaso hacía escaso tiempo y los equipos informáticos ya se encontraban allí instalados.

Si son declarados culpables deberán indemnizar a Microsoft en la cantidad que se determine en la ejecución de la sentencia por los perjuicios causados.