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Un joven de nacionalidad portuguesa, de 24 años de edad, fue detenido el pasado jueves por agentes de la Policía Nacional, acusado de haber propinado una paliza a otro hombre, de nacionalidad española, de unos 50 años, en un piso tutelado de Maó en el que ambos convivían provisionalmente.

El suceso ocurrió el jueves cuando la mujer que está al frentre de la vivienda regresó a su casa y la encontró revuelta y con muchos restos de sangre en distintas estancias.

Al parecer la víctima llevaba pocos días residiendo en esa casa en la que también habita otra pareja, cuyo hombre, por motivos que no han trascendido, fue el acusado de propinarle la brutal agresión. El herido tuvo que ser atendido por el médico del 061 y posteriormente fue trasladado al Hospital Mateu Orfila en una ambulancia, donde le apreciaron varias fracturas en el rostro, en la mano, y en una costilla, además de una herida inciso-contusa en el costado que, probablemente, fue producida con un arma blanca.

La víctima explicaría a la Policía, tras ser atendido en el Hospital que comenzó a recibir golpes y puñetazos de forma indiscriminada sin que apenas pudiera reaccionar cuando se encontraba durmiendo en la cama que ocupaba provisionalmente en la casa. Tampoco pudo advertir, en principio, quién era la persona que le estaba pegando.

La Policía, tras tomar la declaración a la víctima localizó al presunto agresor y procedió a su detención. El viernes fue puesto a disposición judicial en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Maó.