El hombre fue detenido y trasladado a la Comisaría de la Policía Nacional.

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Fue detenido por agentes de la Policía Nacional de Maó el pasado jueves, bajo la acusación de lesiones y agresión sexual a la mujer con la que compartía vivienda en una casa de la zona de Dalt Vilanova. El hombre, de 40 años de edad, nacido en Nigeria, quedó en libertad con cargos el fin de semana, tras declarar en el Juzgado de Instrucción número 1 de Maó. El juez dictó medidas cautelares y le puso una orden de alejamiento de la mujer hasta la celebración del juicio, por lo que ha tenido que abandonar la casa.

La víctima, guineana de 26 años, denunció que había sido violada en varias ocasiones cuando informó a la Policía y a los médicos que la atendieron en el Hospital tras el episodio violento ocurrido sobre las 9 de la mañana del 4 de abril que acabó con la detención del acusado.

Ambos habían discutido hasta llegar a agredirse porque ella le reclamaba que abandonara la casa. El hombre presentaba el labio roto del que emanaba sangre y ella también tenía el pómulo hinchado y un corte en el rostro. La joven le había dicho que no podía continuar bajo el mismo techo, precisamente, porque, aseguró, trataba de abusar de ella con cierta frecuencia. Era la joven la que tenía la titularidad del alquiler, y explicó a los agentes que le había permitido alojarse en el mismo domicilio para ayudarle, aunque nunca mantuvieron ningún tipo de relación. Habían transcurrido más de tres años desde que el acusado compartía la vivienda.

La joven denunció que aprovechaba cuando ella estaba somnolienta por haber ingerido alcohol, para entrar en su habitación y realizarle tocamientos. Dijo que al menos en tres ocasiones había sido penetrada aunque no lo había denunciado por miedo a posibles represalias.

En la mañana del pasado jueves la discusión subió de tono, al parecer él le agredió en la cara y posteriormente recibió el impacto de una taza en su labio.

Un vecino escuchó los gritos de la mujer, dio avisó al 112 y acudieron al lugar del suceso varias patrullas de la Policía Nacional y la Policía Local de Maó. El hombre también precisó asistencia médica en el Hospital Mateu Orfila, al igual que la mujer, y posteriormente fue conducido a los calabozos de la Comisaría de la plaza Miranda. Allí los agentes comprobaron por su filiación que se encuentra en España en situación irregular.