La gangaria, en Maó, es un ejemplo físico de la compra-venta de segunda mano | Javier Coll

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El auge del mercado de segunda mano en la Isla desde el inicio de la crisis es difícil de cuantificar, pero fácil de percibir. Un ejemplo: el grupo de Facebook de compra-venta de segunda mano más popular en Menorca cuenta con casi tantos miembros como habitantes tiene Maó.

El número de particulares que anuncian coches, pisos, electrodomésticos o antigüedades en la sección de Particularidades de «Es Diari» o en publicaciones especializadas no decaen y a ellos se suman los casi 28.000 usuarios de «Menorcadillo» o los 10.500 de «Anuncios de Menorca», páginas que aparecieron a partir de 2010. Su popularidad creció de la mano de la crisis económica, con la necesidad de comprar más barato y de deshacerse de lo que no se usa, algo que facilitan las redes sociales.

Pero no todas ellas tienen detrás a una empresa. Manuel Avilés filtra desde 2013 todos los anuncios que se cuelgan en «Oportunitas Menorca», un grupo de Facebook que creó «para ayudar a la gente que no tiene». Este jubilado dedica ratos del día a día a avisar a usuarios que no cumplen las normas y bloquear fraudes, una afición con la que facilita que la gente pueda comprar y vender, con un ahorro en el precio que oscila entre el 30 y el 70 por ciento, y con el aliciente de encontrar productos descatalogados ya en los espacios de venta convencionales.

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