En el Lazareto se podrán mantener las visitas guiadas tanto de menorquines como visitantes y además invitan a grandes empresas a organizar eventos corporativos en un marco especial y único. | Gemma Andreu

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El simple traslado en barca desde Calesfonts al islote del Lazareto ya permite hacerse una idea de que el lugar de destino es especial y singular. Vestigio de una época pasada y con unos usos que han ido evolucionando, el imponente enclave situado en el puerto de Mahón abre una nueva etapa de la mano de la Fundació Foment del Turisme de Menorca con el objetivo de convertirse en referencia nacional e internacional como destino de Turismo MICE, una opción que permite mantener las visitas guiadas tanto a menorquines como visitantes y que invita a grandes empresas a organizar eventos corporativos en un marco especial y único.

Con motivo de la llegada a Menorca de la peste bubónica a través de los barcos procedentes de Oriente y el norte de África, el Conde de Floridablanca, ministro del rey ilustrado Carlos III, mandó la construcción de El Lazareto de Mahón, por orden de éste en 1793, pero no fue hasta 1817 que entró en funcionamiento. Este primer uso tiñe de tristeza la instalación y las historias que allí se guardan, convirtiéndolo además en un elemento capital del catálogo del Patrimonio con el que cuenta la isla de Menorca. Además, en 1993 fue declarado Bien de Interés Cultural.

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La importancia histórica y patrimonial de el Lazareto de Mahón obliga a una gestión especialmente responsable, apostando por eventos más pequeños y con carácter más profesionales que los que ha acogido últimamente. Tras la cesión por parte del Consell Insular de Menorca de la gestión de eventos y proyectos en el islote a favor de la Fundació Foment del Turisme de Menorca se ha apostado por el Turismo MICE, que en su acrónimo inglés significa de reuniones, incentivos, congresos y eventos. Este tiene como objetivo grandes empresas que acostumbran a organizar eventos en lugares especiales con un presupuesto elevado con el objetivo de ligar a su marca la singularidad de estos propios espacios.

Desde la Fundació se ha trazado un plan de promoción específico de la instalación que consiste en acudir a ferias, convenciones y congresos especializados en dar a conocer este tipo de escenarios. El primero de ellos ha sido el encuentro para profesionales Mallorca Loves MICE, que se celebró el pasado viernes, 15 de marzo, y donde uno de los tres videos que se proyectaron fue el de El Lazareto. Al margen de esta acción y entre otras que se realizarán, en mayo la Fundació participará en la feria IMEX de Frankfurt, en Alemania, en noviembre lo hará en la ITMB World, en Barcelona, y hacia final de año participará en otro evento en Mallorca.

La Fundació ya ha cerrado una quincena de eventos MICE para este año en el poco margen de tiempo con el que ha podido trabajar, por lo que se palpa la predisposición y las ganas que tienen las empresas de descubrir el maravilloso enclave que supone El Lazareto. La primera en hacerlo con la nueva condición de uso será la Olimpia Chess Academia, del 22 al 24 de marzo, a través del II Congreso de Ajedrez, Educación y Salud. También pasarán por el islote un congreso de técnicos sanitarios, así como un retiro de una semana para artistas que organiza Quarantine Events para el mes de octubre.

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Al margen de estas actividades, El Lazareto seguirá siendo accesible para menorquines y visitantes con el programa de visitas guiadas que se pueden contratar a través de la Fundació, así como las visitas guiadas escolares que se seguirán gestionando a través del Consell Insular. Las visitas guiadas se llevarán a cabo desde mayo hasta octubre, aunque se trabaja para incorporar el mes de noviembre.

Las tasas de uso ligadas a El Lazareto están marcadas por la Ordenanza Fiscal aprobada por el anterior equipo de gobierno del Consell Insular en el pleno ordinario celebrado el 20 de febrero de 2023, y desde la Fundació apuestan por mantener las tarifas, así como las bonificaciones y descuentos que se aplican a entidades que oscilan entre el 75% y el 50%, siempre que cumplan los criterios marcados por la Ordenanza.