El debate electoral celebrado el 24 de mayo ya evidenció los distintos planteamientos y propuestas de Carol Cerdà y Maria Jesús Bagur desde el PSOE y el PSM-Més. | Gemma Andreu

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Dos semanas después de las elecciones municipales y autonómicas, y con la vista puesta en las generales del 23 de julio, se acumulan los silencios y las preguntas, pero las respuestas no llegan.
Desconocemos los motivos reales del desacuerdo que ha impedido presentar una candidatura conjunta de la izquierda menorquina al Senado, lo que da alas al PP para revalidar el acta de senador por Menorca.

No sabemos tampoco a qué obedece realmente la sorprendente renuncia, antes de tomar posesión, de Elvira Capó y Manu Morales como consellers electos del PP, lo que obliga a Dolfo Vilafranca, presidente in pectore, a modificar el cartapacio inicial, con la entrada en el futuro equipo de gobierno insular de Simón Gornés y Núria Torrent.

Y tras haber atado el PP, mediante pacto con Jorge de Diego, la quinta alcaldía de Menorca, que el próximo mandato desempeñará Loles Tronch en Sant Lluís, persisten las dudas sobre la alcaldía de Ciutadella por el crónico y reiterado desacuerdo entre el PSOE y PSM-Més, cada uno con sus estrategias. No ayuda la obstinación y mala relación personal entre las dos candidatas: Carol Cerdà y Maria Jesús Bagur, cuyos forzados saludos, que transitan entre la frialdad y la gelidez, anuncian una cohabitación explosiva.

El 2 de junio movió pieza la asamblea del PSOE-Ciutadella al proclamar que «los resultados electorales deben traducirse en un gobierno municipal progresista liderado por los socialistas». O sea, corresponde a Carol Cerdà desempeñar la alcaldía hasta junio de 2027. Y, una semana después, ha respondido la asamblea del PSM con esta interpretación: «la ciudadanía ha apostado por un liderazgo compartido durante los próximos cuatro años entre las dos fuerzas que hemos obtenido el mismo número de concejales, PSOE y PSM-Més». Conclusión: vamos a compartir la alcaldía porque tenemos el mismo número de concejales.

El concejal de Ciutadella Endavant, Sebastià Servera, quiere actuar como mediador entre Cerdà y Bagur, pero concejales electos del PSOE ya han advertido con rebelarse si hay cesión de la alcaldía a Més.

El acuerdo fallido

El fracaso de las negociaciones para presentar un candidato unitario de la izquierda al Senado complica, aún más, las negociaciones, a cara de perro, para la alcaldía de Ciutadella. Al final habrá una candidatura del PSOE a la Cámara alta y otra candidatura de Més per Menorca que concurrirá con Esquerra de Menorca-EU.

Intentemos averiguar qué ha ocurrido, porque la culpa siempre es de los otros. Dice el PSOE de Susana Mora, aunque el peso de la negociación recayó en Damià Borràs, que la decisión «viene motivada por el hecho que las otras formaciones de izquierdas hayan alterado las condiciones inicialmente acordadas, imposibilitando el objetivo de una candidatura unitaria». ¿Y cuáles son las condiciones acordadas?, que desconocemos, y que, según el PSOE, constituyen el detonante de este fracaso. Sólo apunta, y aquí reside la clave, que el objetivo era «conseguir una candidatura unitaria para Menorca encabezada por una persona propuesta por el PSOE, tal como se había previsto».

¿Quiénes, cuándo y cómo lo habían previsto?

Més per Menorca da un paso al lamentar que «el PSOE haya condicionado el acuerdo queriendo imponer candidatos claramente de partido y no con perfiles de consenso, demostrando así una clara voluntad de aproximarse al resto de partidos». ¿Y quiénes fueron estos candidatos de partido que pretendió imponer el PSOE a Més y EM-EU?

Finalmente, Esquerra de Menorca, añade: «el PSOE ha entendido que tenía que presentar candidatos claramente alineados con su formación política, lo que imposibilitaba el acuerdo e iba en contra de la filosofía de nuestra propuesta». En aras a la transparencia y para que los menorquines sepamos a qué atenernos, hay que conocer quiénes fueron estos candidatos. ¿Se sabrán?

Joana Barceló

En plena negociación se filtró, a través de IB3, el nombre de una persona que ni había sido informada ni consultada. La expresidenta Joana Barceló no salía de su asombro e incredulidad al ser preguntada sobre el inexistente acuerdo alcanzado por PSOE, Més y EM-EU, que, en cambio, era tan alegremente difundido. Porque, ¿quién filtró el nombre de Barceló?, ¿a quién benefició y a quién perjudicó esta filtración?

Dos renuncias

La semana política aporta el organigrama del gobierno que formará Dolfo Vilafranca, con la incógnita del conseller no electo, y las inesperadsa renuncias de Elvira Capó y Manu Morales. Decisiones tan raras y tan sorprendentes que nadie esperaba antes de empezar el mandato, el 8 de julio.

El apunte

Las preguntas de la semana

  • ¿Por qué no se celebran primarias para designar a los candidatos de las elecciones generales del 23 de julio?
  • ¿Qué opciones tenía la izquierda para recuperar el acta de senador por Menorca si hubiera concurrido junta?
  • ¿Por qué en Eivissa ha prosperado la candidatura unitaria de las formaciones de izquierda al Senado y en Menorca ha fracasado?
  • ¿Volverán a reunirse los negociadores del PSOE y PSM para intentar un acuerdo en torno a la alcaldía de Ciutadella?
  • ¿Quién será la consellera menorquina en el Govern y quién será el conseller no electo en el Consell insular?