Dos meses después de las elecciones del 28 de mayo, y un mes después de la toma de posesión de la nueva presidenta Marga Prohens, el Govern nombra a los nuevos directores de los servicios centrales del IB-Salut y los gerentes del Área de Salud de Ibiza y Formentera, así como de los hospitales de Inca, Son Llàtzer, el 061 y el de Atención Primaria.
Pero sigue sin ser nombrado el nuevo gerente del IB-Salut en Menorca, entre otras razones porque aún no cuenta la consellera Manuela García Romero con el ‘plácet’ del Consulat de Mar para designar a quien relevará a la doctora Ana Trenado Andreu.
La consellera García Romero, que desempeñó la presidencia del Colegio de Médicos de Balears del 2018 al 2020 y después ejerció como vicepresidenta segunda del Consejo General de Colegios de Médicos de España, pensó, para gestionar el IB-Salut de Menorca, en el perfil y la trayectoria del doctor Luis Navas Casals, con quien había trabajado estrechamente en la organización colegial médica. Pero la consellera, adjunta al Servicio de Anestesiología del hospital Son Espases y nueva en la política, ha descubierto que los nombramientos de los cargos institucionales siguen otros extraños derroteros hasta que, tras sortear varios vericuetos, logran llegar a la mesa del Consell del Govern.
En el Mateu Orfila
Luis Navas, a quien no le gustan los rodeos, se expresa con rotundidad: «estoy jubilado», afirma, sin confirmar ni desmentir su condición de candidato a dirigir la sanidad pública menorquina durante estos próximos cuatro años.
Sabe que su nombre corre por los despachos, pasillos y quirófanos del hospital Mateu Orfila, donde los profesionales no comprenden la demora en la designación del nuevo gerente y esperan que acabe lo antes posible el actual periodo de transición para que se puedan tomar decisiones.
Y mientras prosiguen las conversaciones en los despachos, el doctor Navas dedica gran parte de su jornada a las más variadas labores agrícola-ganaderas, sin prisa pero sin pausa, en el lloc situado entre Alaior y Maó.
Comparte esta actividad al aire libre con Luis Alejandre Sintes, además de ser buenos vecinos del Camí des Castell de Maó, donde residen ambos, a escasa distancia. Quede constancia de que el general impulsor de la restauración del hospital británico en la Illa del Rei desarrolla su faceta de payés menorquín a menor escala que el médico de Alaior.
El doctor Pax Bosch
A la espera de la respuesta definitiva del doctor Navas, que el 10 de junio recibió la Medalla al Mérito Colegial en el Lazareto, ya hay otro nombre sobre la mesa: el doctor Bernardo Pax Bosch, que Mateu Aínsa incluyó como número 3 en la candidatura con la que el PP concurrió a las elecciones municipales del 28 de mayo.
El doctor Pax, que conoce a la perfección los entresijos del hospital, donde ha desempeñado la jefatura del Servicio de Urgencias, es hoy concejal de la oposición en el Ayuntamiento de Maó.
Aínsa Coll ya se ha incorporado al equipo de gobierno del Consell como director insular de Medio Ambiente, adscrito a la conselleria que dirige el vicepresidente Simón Gornés.
En el ambiente de desazón y preocupación que marca el actual momento de incertidumbre en el Mateu Orfila, también circula el nombre de otro médico. El doctor Claudio Triay Madrid, hoy al frente del Sindicato Médico de Balears en Menorca, que ya desempeñó la gerencia del IB-Salut. El hombre del Simebal en Menorca, que mantiene línea abierta con el doctor Miguel Lázaro, presidente de esta reivindicativa organización profesional, se habría descartado; de la misma manera que el doctor Fernando Alcaide Matas, jefe del Servicio de Cirugía en el hospital, que seguirá ejerciendo su actividad profesional, a pesar de la autorictas que le caracteriza y define.
Jaume Orfila i Timoner
Entre quienes siguen y conocen la situación de la sanidad, pública y privada, en Balears se comenta con extrañeza que el nuevo Govern no haya adjudicado ninguna responsabilidad al médico menorquín Jaume Orfila Timoner.
Este médico, alayorense como Luis Navals, intervino en la preparación y redacción del programa sanitario con el que el PP-Balears concurrió a las elecciones del 28 de mayo. Son aquellas cosas que tampoco consigue entender Manuela García Romero, que no vendrá a Menorca para reunirse con los jefes de Servicio del Mateu Orfila hasta que, quienes pueden decidir, hayan resuelto el nombramiento del gerente del IB-Salut. La nueva consellera quiere plantear la construcción del segundo centro de Salud en Ciutadella. La política le marca otros ritmos.
