«Los incidentes ocurrieron cuando ustedes gobernaban»

La decisión del equipo de gobierno, encabezado por la alcaldesa Juana Mari Pons Torres, de no renovar el convenio con la asociación de comerciantes Ciutadella Antiga para organizar eventos culturales al aire libre ha desnudado la realidad de los incumplimientos de este acuerdo.

Más allá de las críticas habría que preguntar a quienes están hoy en la oposición porqué en 2023 se podían organizar 25 conciertos pero solo se celebraron cuatro y los cuatro en el mismo establecimiento. Actividades que motivaron denuncias por consumo de alcohol en la vía pública, donde se registró un exceso en la ocupación autorizada, además de quejas por ruidos y peleas callejeras. Todos estos datos constan en los informes policiales, a los que tenían acceso quienes antes gobernaban.

EL ESPERPENTO

De ahí, al esperpento. La concejal del PSOE Sandra Moll agradece que se den a conocer unas irregularidades que también interpelan a Ciutadella Antiga, pero añade a continuación, la edil socialista: «nos podrían haber informado el mes pasado», cuando es ella quien debería tener constancia de todo lo ocurrido antes de las elecciones de mayo para explicarlo a quienes hoy dirigen el Ayuntamiento.
De ahí que el concejal Fullana León, aunque no quiso hacer sangre en la respuesta a Moll Taltavull, no obtuviera réplica: «puesto que estos incidentes se produjeron cuando ustedes gobernaban, daba por hecho que los conocían», afirmó el concejal de Cultura.

Porque una cosa es el relato y, otra, distinta, la realidad. El convenio con Ciutadella Antiga no se ha renovado tras ser consultados los técnicos municipales, que lo desaconsejaron. El PSOE quedó solo, porque sus únicos votos apoyaron la revisión del acuerdo para renovarlo, el PSM optó por la abstención, y PP y Vox se pronunciaron en contra.

La pelota, naturalmente, está ahora manos de Miguel Pablo Fullana, quien ha constatado que también hay teatro municipal y escenificación política en el escenario del Salón Gótico. Le corresponde al responsable del área de Cultura, después de los Carnavales, que centran su atención, poner en marcha el ciclo de actividades de música y ocio al aire libre.

Cabe suponer que este año se celebrarán más de cuatro conciertos y que tendrán lugar en distintos establecimientos.

HOSPITAL COMARCAL

Con 16 votos a favor -del PP, PSM, Ciutadella Endavant y Vox- y la abstención de los cinco concejales del PSOE, el Ayuntamiento de Ciutadella ha aprobado el acuerdo para la cesión de dos parcelas con una superficie de 9.000 metros cuadrados en Santa Rita al Govern para construir el nuevo equipamiento sanitario que precisa el municipio de Poniente.

Es impensable que Ciutadella deba esperar diez años para la construcción y entrada en funcionamiento de estas instalaciones, tras resultar insuficiente el centro de salud Canal Salat y no ser posible su ampliación. Gobierno municipal y oposición han de participar en un frente común para exigir al IB-Salut este equipamiento.

Pero todo es posible en los laberínticos meandros de la Administración al recordar que ahora se cumplen seis años -nos remontamos a febrero de 2018- de aquel fastuoso acto en el que Francina Armengol, Susana Mora, Marc Pons y Martí March anunciaron la transformación de la terminal de pasajeros del puerto urbano de Ciutadella en un nuevo Centro Integrado de FP de Hostelería y Turismo.

Seis años después, las obras de este centro ni se han licitado ni han empezado. De ahí las dudas que amenazan al futuro hospital comarcal en Ciutadella, que ha de contar con prestaciones para garantizar una eficaz atención sanitaria.

Sin olvidar el servicio que presta el Grupo Juaneda con el Hospital Ciutadella, ejemplo de colaboración entre la sanidad pública y privada que se extiende a los tratamientos de radioterapia en la Isla. El director médico y el gerente de este hospital, Xavier Pons Marquès y José Luis Bosch Marquès, fueron homenajeados ayer noche en la gala de los Ciutadellencs de s’any 2023.

APARCAMIENTOS

La concentración de equipamientos públicos en la zona de Santa Rita demanda una inteligente planificación y previsión de plazas de aparcamiento, tanto para los profesionales que trabajarán en estos centros como los usuarios y sus familiares. Más vale reclamar ahora que lamentarse después.