Cartas de los lectores

Resulta que, a un PP que nunca reparó en gastos y despilfarros cuando gobernaba, los presupuestos de este año les parecían "expansivos". Desde UPCM dejamos claro que no eran los que nosotros habríamos elaborado. Y precisamente por eso, pusimos una serie de condiciones para aprobarlos. Entre ellas que se rebajasen todas las partidas de gasto que fuese posible. Proponíamos además que se adoptasen medidas concretas, dejando intacta la partida de 349.158 € del "servei ordinari de netetja de les escoles", que no tenía que reducirse para nada, rebajando en cambio en un 40 % los 381.654 € del "servei ordinari de netetja d'edificis", lo que supone un ahorro de más de 150.000 € sólo en esta partida concreta. Se trata de una medida aplicada con éxito en empresas privadas más grandes que el Ayuntamiento.

Reducir cualquier gasto implica siempre que alguien recibirá menos ingresos, porque alguien no percibirá lo que se deja de gastar. Pero ahora resulta que el PP se ha erigido en defensor incondicional de unos presupuestos "expansivos" que no hizo nada positivo por corregir, de los que no quiere que se deje de gastar ni un céntimo. Ahora ponen el grito en el cielo porque los presupuestos van a ser menos "expansivos" de lo que habían previsto.

De cómo entendían las "ocupacions de la via pública ordenades a Ciutadella" y la "convivencia", da una idea muy exacta el ejemplo que dieron algunos concejales del llamado grupo mixto. Porque resulta que la mayor ocupación de Ciutadella la tenía un bar muy estrechamente vinculado con un Concejal tránsfuga del PP que se ha pasado a UMe. Encima sobre ocupaba eventualmente más de 20 metros. Y se llegó a conculcar el derecho del negocio vecino al revocarle el permiso que le había otorgado inicialmente para ocupar el espacio situado enfrente de su propia fachada. Un funcionario dócil decidió que el interés general estribaba en que el bar del Concejal ocupase el espacio situado delante del negocio colindante, en contra de la voluntad del afectado. Curiosamente, al reproducirse exactamente el mismo caso en otra plaza, el funcionario en cuestión, emitió informe en el sentido de revocar el permiso concedido a otro bar, retirándole la autorización para ocupar el espacio situado delante del comercio contiguo, en cuando éste le revocó el consentimiento que le había dado para hacerlo.

Es decir, el criterio era permitir la ocupación frente a la fachada de los inmuebles adyacentes si mediaba el consentimiento de sus propietarios, cuyo derecho podía ser pisoteado en cambio, si se tenía la mala suerte de tener por vecino a determinado regidor. Por no hablar del incumplimiento del deber de abstención por parte de dos concejales tránsfugas, cuando en el Pleno de junio de 2008 se votó la propuesta, que no prosperó, de cerrar con plásticos los laterales de los "tendals".

Como para dar lecciones de "convivencia" y ocupación "ordenada".

Además, lo único que se hacía era cobrar los metros de sobre ocupación al mismo precio que se cobraba la ocupación concedida. El mensaje que se transmitía era por tanto ocupar lo que se quisiera, al final se iba a pagar lo mismo. Esta política se ha seguido también por el gobierno PSOE-PSM. Sólo ha habido un paréntesis en que se hizo cumplir la normativa, el de UPCM. Hacer normas para que se incumplan es instaurar el desorden.

El colmo del oportunismo y la contradicción llegan cuando se habla de "anormalidad institucional" a raíz de "protestas ciudadanas" protagonizadas por unas pocas personas. Cuando en la pasada legislatura se manifestaron abiertamente cientos de ciudadanos contra algunas políticas del gobierno PP-PMQ. Nunca la política de un área municipal había suscitado tanto rechazo popular como la del Sr. Pons Fedelich.

Mas recientemente, la anormalidad institucional se manifestaba en plenos abarrotados de ciudadanos que exteriorizaban su repulsa ante un gobierno tránsfuga. ¿Y que hizo el PP por normalizar la situación? Anunciar que iba a abstenerse cuando se presentase la moción de censura. Indiferencia total ante la mayor "anormalidad" institucional que se ha vivido nunca en Ciutadella, la hubieran permitido hasta 2011.
UNIÓ DES POBLE DE CIUTADELLA
DE MENORCA (UPCM)