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"Rave" ilegal de Sant Lluís

A través de la presente quiero manifestar mi sorpresa y malestar con los organizadores de la "rave" de Sant Lluís quienes de forma falsa anunciaron mi participación en la referida "rave" ilegal, como se ve en la noticia publicada en el periódico "Menorca" del lunes 28 de agosto. Quiero aclarar que en ningún caso participé en dicha fiesta, ni presté mi consentimiento para que se anunciara mi asistencia. Aprovecho para defender mi profesionalidad manifestando que exclusivamente presto mis servicios como discjockey en fiestas legales y locales autorizados.

Javier Sastre Vidal, Dj Sas
Maó

¡Indignada!

Esta carta va dirigida a todos los empresari@s que estos dos últimos años contratan a trabajador@s por sueldos que nos recuerdan a 1994. Contratan por la mitad de las horas que trabajamos, y a veces, ni siquera la mitad de la jornada; como darte de alta por dos horas cuando estamos trabajando las ocho que exige la ley. Con esto sólo quiero decir que somos muchos lo que por culpa de estos "empresarios" cada día estamos peor económicamente. Ellos ganan lo suficiente para pagar sus negocios y pasar un invierno "calentito", mientras que los trabajadores estamos cada día más "indignad@s". No parece que a nadie le importe, creo que solo nos importa a los que estamos trabajando sin día libre, cotizando la mitad de las horas que trabajamos, y encima con el finiquito incluido.

Trabajo 9 horas sin día libre, cotizando solo 4 horas, y mi finiquito está incluido en mi sueldo de 800 euros/mes.

¡Como yo hay mucha gente más!

Patricia García Pérez
Ciutadella–Barcelona

También estoy decepcionado

Me sumo a la decepción que Ricardo Pons Meliá ha sufrido, al aparecer Maó en el programa de fiestas de nuestra ciudad en castellano.

En este tema me siento con el derecho a opinar, como cualquier ciudadano, y entiendo que debe ser el pueblo quien debe resolver el conflicto y cuanto antes.

Tengamos en cuenta que Maó no estaba legalmente normalizado por nuestro Ayuntamiento y los medios empezaron a utilizarlo, por tanto, para que el Mahón sea definitivo y para siempre debe tener la palabra el pueblo.

De no hacerse así, cualquier futura llave política municipal podría legalmente cambiar el nombre histórico por el catalán, causando irreparable pérdida de identidad de nuestra ciudad, tal como está ocurriendo.

Antonio Pons Villalonga
Maó