Editorial01/03/18 20:26
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El Govern distinguió ayer con el Premi Ramon Llull, en el acto institucional del Dia de les Illes Balears, al bajo barítono Simón Orfila y a Deborah Helyler, que durante años desempeñó con eficacia las funciones de vicecónsul de Gran Bretaña en la Isla. Dos trayectorias vitales y profesionales diferentes, una en el ámbito de la cultura y la expresión musical, en el caso del cantante lírico nacido en Alaior; y de plena integración y colaboración con la sociedad menorquina en el caso de Deborah Heyller, que se enorgullece de ser considerada menorquina de adopción.

Acertó el Ayuntamiento de Alaior al proponer el Govern de la Comunidad Autónoma el Premi Ramon Llull para Simón Orfila, que gracias a una viva vocación y un gran esfuerzo de formación, está protagonizando una carrera llena de éxitos con repercusión internacional en numerosos ámbitos. Merecido también este reconocimiento para Deborah Heyller que hoy, después de haber ejercido como representante del gobierno británico y atendido tanto a numerosos visitantes de Inglaterra como residentes de aquel país en Menorca, colaboran con entidades de la Isla. Nuestra cordial felicitación a Simón y Deborah.