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El debate sobre política general celebrado ayer en el Consell no aportó novedades y despertó escaso interés. Se comprobó que la crisis de gobierno no va más allá de un desencuentro entre los líderes de los dos grupos que lo forman y que el PSOE y el PSM siguen siendo una pareja de hecho. La oferta del PP a los socialistas para animarles al gobierno en minoría y a acordar con ellos los temas más importantes fue descartada por el presidente, porque el distanciamiento entre los dos partidos mayoritarios es mayor que el que mantienen Pons y Allés. Al margen de pactos, los partidos deberían ser capaces de llegar a acuerdos en materia económica. Sin duda, lo que interesa a los ciudadanos es la generación de empleo. Marc Pons acudió a las encuestas y datos estadísticos para descubrir los brotes verdes que han de permitir que la economía insular mejore este año con relación a 2009. Asegura que el clima de confianza se incrementa entre un 23 y un 33 por ciento, mejora la contratación y la llegada de pasajeros. No basta el optimismo para superar una crisis. Después de una Semana Santa de poca actividad, estamos en la antesala de una temporada con retos que merecen un esfuerzo común.