TW
0

Esta mañana de frío y niebla, me tomo un café y leo un artÍculo que me da escalofríos, textualmente dice "El profesorado pide apoyo para acabar con el acoso", según el citado artÍculo el teléfono del defensor del Profesor echó chispas en el último año. Se recibieron más de cien llamadas de las que 39 eran muy graves.

¿Será cierto que los docentes sufren con frecuencia situaciones de acoso e incluso de agresiones psíquicas?, y que se ven incapaces de dar las clases, por la problemática que presentan algunos alumnos. Me sigo preguntando ¿estamos ante una pérdida de autoridad del docente? Si fuese así las autoridades deberían tomar cartas en el asunto, con la celeridad suficiente para que casos como estos no ocurran, y sensibilizar también a los padres que los alumnos deben respeto y consideración al profesor, porque convendrán conmigo que así no podemos exigir a nuestros profesores una enseñanza de calidad, si la que están ejerciendo, es con presión y con cierta burlonería juvenil .

Tampoco quiero regresar a aquellos tiempos en que el señor maestro, era el señor maestro, los que tenemos cierta edad saben lo que quiero decir, en todo su amplio contenido, pero de aquella autoridad tan criticada actualmente, a la autoridad de ahora va un abismo.

En el supuesto de que sólo sea una minoría se debería habilitar algún otro medio de enseñanza-taller para alumnos problemáticos, todo redundaría en una mejor educación, tanto de arriba hacia abajo como colateral, me explico profesor-alumno-padres.

También y por ultimo dirigir a los padres esta pregunta ¿para qué futuro educamos a nuestros hijos?, y al mismo tiempo preguntarnos también no tanto lo que deseamos hacer con los educandos, si lo están haciendo bien o mal, sino qué debemos hacer con nosotros, entre nosotros,…con los padres…¿qué tenemos que aprender?..Aprender a convivir…,aprender a ser…Esta es la reflexión que hoy les quiero dejar.

_____

Luissanz66@hotmail.com