TW
0

Vicente Macián Cólera falleció en la madrugada de ayer y deja un profundo vacío en muchos ámbitos en los que se hizo presente, sirviendo a las personas desde su ministerio sacerdotal, con una sonrisa siempre cálida y amable. Estuvo al lado de los enfermos en el hospital, acompañando a quienes emprendían el mismo camino que ahora él recorre. Participó en la actividad docente y se sentía especialmente ligado al primer instituto de Maó. La música fue una de sus grandes pasiones y la valoró con sus crónicas y comentarios, impulsando el esfuerzo de los compositores e intérpretes de la Isla. Ejerció de periodista cultural en este diario durante muchos años, con una enorme constancia y dedicación. Y fue en esencia un sacerdote próximo y querido por tantas personas a quienes transmitió bondad, como una actitud evangélica. Vicente Macián se va pero deja su testimonio de compromiso con la sociedad menorquina. Este diario se ha beneficiado de su dedicación y de su presencia en nuestra redacción. Hasta su último artículo ha servido para transmitir el amor que sentía por este medio de comunicación en el que ha estado presente durante la mayor parte de sus 70 años. Gracias "pater".