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3-X-12

En el Palau de Sant Jordi, y con los migjorners Sito y Paca, colocamos a la ominosa actualidad entre paréntesis para levitar con la poesía hecha música de Leonard Cohen con la que uno lleva dialogando desde hace cuarenta años y ahora por primera vez en vivo y en directo (de hecho era mi segundo concierto: el primero fue de Raimon en Zaragoza en ¡1968!). El vate de Montreal, a sus 78 años y dentro de su sobriedad habitual, se arrodilla una y otra vez, salta e incluso compone algún paso de baile. Pero lo que subyuga es su voz, su palabra, sus versos, sus melodías realzadas esta vez por laúd, bandurria y violín así como por su habitual (y excepcional) coro de voces femeninas.

El tiempo pareció detenerse en el Palau cuando el canadiense más universal recordó el día en que quería ser libre y se sentía como un pajarillo en su jaula y vio a un pordiosero que le dijo que no debía pedir tanto y luego a una mujer guapa quien, desde un portal oscuro, le gritaba: ¡Eh, Leonard!, ¿por qué no pides más? (Bird on the wire). Dudas existenciales, muchas, certezas, pocas, durante las casi cuatro horas de un recital en el que no se limitó al inevitable ejercicio de nostalgia con "Suzanne", "So long Marianne" o "Famous blue raincoat", sino que nos presentó sus nuevas canciones de su último trabajo "Old ideas", con su majestuosa "Going home" que empieza rozando la inmodestia o la auto ironía, según se mire: "I love to speak with Leonard", me encanta hablar con Leonard. A mí también, cada vez más. Salud, maestro.

5-X-12

Tras el excursus iniciático del nuevo curso debo incurrir en otro. Y es que no puedo soslayar el agradecimiento que siento hacia mis paisanos y a los medios de comunicación sin excepción por su cariñosísima acogida del pregón de fiestas que tuve el honor de pronunciar hoy hace un mes. Han sido tantos los testimonios de afecto recibidos que me resulta imposible agradecerlos personalmente. Lo voy haciendo a medida que me recreo en el Ep aquí callejero que reclamaba desde el balcón de Dalt la Sala para "hacer ciudad".
Mil gracias al equipo de gobierno del Ayuntamiento por su exquisito trato antes, durante y después del pregón, y también al partido de la oposición por su divertida y cariñosa carta de reconocimiento al recién armado caballero mahonés Oliaigo Pons, quien me encarga que transmita a todos su inmensa felicidad por haber podido exteriorizar, con todos los honores, lo que siente por la ciudad y sus paisanos.

6-X-12

Tras la catarsis de Leonard viene el gatillazo de Obama en el primer debate televisivo con el canditato republicano Mitt Romney. Y me preocupa (tanto que he contribuido con 25 dólares a su campaña) porque me asustan los fanatismos sobre todo si se aprestan a gobernar el país más poderoso de la tierra. Y hoy día, el venerable partido republicano es rehén del llamado Tea Party, su facción más ultra y desalmada, contraria a todo tipo de intervención estatal, incluida la de proporcionar un mínimo de sanidad pública a la ciudadanía, que trataría la política exterior con el palo de las acciones preventivas y la zanahoria de la siembra de "emprendedores" por el mundo, y que considera como vagos y chupópteros a los votantes de Obama… ¡Socorro!

7-X-12

"Clásico" por aquí, clásico por allá. ¿Politizado? El fútbol sería,-parafraseando a Von Clausewitz y sustituyendo fútbol por guerra-, la continuación de la política por otros medios. Siempre ha sido así, y en este sentido, el campeonato de Europa de selecciones nacionales sería paradigmático (positivamente) en un continente hasta hace poco devastado por guerras intestinas. Ojalá todos los conflictos se dirimieran en un terreno de juego.

La exhibición de cuatribarradas y esteladas en los graderíos del Nou Camp me preocupa tan poco como la también masiva floración de banderas españolas con pájaro incluido y pancartas insultantes para los catalanes cuando el Barça visita el Bernabéu, de lo que he sido testigo en varias ocasiones, más allá de cierta incomodidad que desaparece en cuanto el balón se pone en juego. El fútbol me sigue interesando y apasionando sólo en el césped.

8-X-12

Aunque no daba dos duros por la victoria de Capriles en Venezuela, no deja de desilusionar su derrota (por goleada) ante el populista Chávez quien tuvo la desvergüenza (una más) de copar la televisión pública en plena jornada de reflexión. No es fácil desbancar democráticamente a caudillos acostumbrados a manejar a su antojo los recursos del estado para subvertir con mayor o menor descaro las instituciones en provecho propio y para crear indestructibles redes clientelares. Lo siento por mis amigos venezolanos, prófugos precisamente de este estado de cosas.

10-X-12

Tiempo veraniego que propicia una gloriosa escapada de última hora a S'Olla de Binisafuller para, entre baño y baño, leer (¿sufrir?) la prensa nacional. Pésimos augurios del FMI sobre la economía española y crisis del estado autonómico en las alturas político-económicas. Más paro y más sufrimiento en la calle, con la desasosegante sensación de que los gobernantes están tan desconcertados como nosotros mismos. Y es que la llamada mano visible del Mercado se ha convertido en la mano que aprieta, un terrible trhiller que aterrorizó nuestra infancia…