Corbeta (archivo de Margarita Caules Ametller)

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A diferencia del escaso movimiento portuario, en pleno siglo XXI, algo que no deja de sorprenderme, es de gran interés comprobar un día cualquiera del mes de diciembre de 1858. Navíos llegados de todas partes, con sus cargas y sus tripulantes, a la vez que hacían lo propio desde nuestro Baixamar, con rumbo a distintos puertos.

ENTRADAS
De Vanssesa. Corbeta prusiana Julios de 332 toneladas. Capitán Mr. Schntt, con 13 tripulantes y carbón mineral.
De Philippeville.- Bergantín francés Pierre, de 128 toneladas, capitán Mr. Collot, con 7 tripulantes y lastre.
Quedando en cuarentena 45 buques.

BUQUES DESPACHADOS
Para Torrevieja.- Corbeta noruega Tire Sonner, de 500 toneladas, capitán Mr. Schetely, con 14 tripulantes y lastre.
Para Tarragona.- Corbeta noruega Steagull de 420 toneladas, capitán Mr. Samosion, con 13 tripulantes y madera.
Corbeta sueca Beate, de 160 toneladas, 9 tripulantes y carbón mineral.
Corbeta danesa, H.E. Lorenson, de 270 toneladas capitán Mr. Jucobsen con 11 tripulantes y carbón.
Para Valencia. Bergantín goleta francesa Joseph de 98 toneladas capitán Mr. Talent con seis tripulantes y lastre.
Laud español, Virgen de la Vía del Cabañal, de 20 toneladas patrón Vicente Figuerola, con 4 tripulantes y 1 pasajero.
Goleta española, Activa de 128 toneladas capitán D. Ramón Sanson, con 10 tripulantes y bacalao.
Corbeta noruega, Wulthonb de 420 toneladas, 14 tripulantes y tablones.
Bergantín inglés Venus, de 221 toneladas capitán Mr. H. Winthey con 1º tripulantes y carbón mineral-
Corbeta noruega Norge capitán Mr. Jedmundsin, con guano.
Corbeta noruega Saendinaon, de 430 toneladas, capitán Mr. Halsen con 13 tripulantes y carbón mineral.
Para Alicante.- Laúd español Puro, de 42 toneladas, patrón Vicente Morales, con 5 tripulantes, 18 pasajeros y carbón vegetal.

PARA BARCELONA
Místico goleta española, Palomo. Capitán don Melchor Llobet, con 76 toneladas, 6 tripulantes y varios efectos.
Polacra española Antonieta, de 1º66 toneladas, capitán don Juan Ferrer, con 11 tripulantes y cueros.
Corbeta inglesa Lady Ebrington de 414 toneladas, capitán Mr. R. Philips, con 18 tripulantes y cacao.
Corbeta noruega Cristiania, capitán Mr. Balbriersen con carbón mineral.
Laud español San Buenaventura de 50 toneladas, patrón Ventura Mayol con 7 tripulantes y algodón.
Bergantín goleta española Carmen de 81 toneladas capitán don Ramón Sala con 6 tripulantes y varios efectos.
Corbeta inglesa G. Queen de 297 toneladas, capitán Mr. Christre con 11 tripulantes y carbón mineral.
Goleta holandesa Jantic Matheu de 94 toneladas capitán M. Ales con 5 tripulantes y varios efectos.
Vapor español Valencia de 215 toneladas capitán don Cristóbal Batalla con 21 tripulantes, 2 pasajeros y varios efectos.
Polacra goleta noruega Dinabor de 200 toneladas capitán Mr. C.M. Aray con 10 tripulantes y carbón mineral.

PARA PALMA.
Laud español San José de 25 toneladas patrón Pascual Ferrer con 5 tripulantes .

PARA SANTA POLA
Laud español San Salvador de 36 toneladas patrón José Alarcón con 8 tripulantes y lastre.

PARA VILLA NUEVA
Polacra goleta Segunda Mercedes de 16 toneladas capitán D. Pedro Carres con 9 tripulantes y suelas.

Con uno de los correos llegó el señor inspector de minas, en visita oficial para recorrer las de esta isla por encontrarse denunciadas. Adjudicó a la sociedad la mina de plomo nombrada Pepita, situada en tierras de Binifabini, manifestando que es digna de verse tanto por la abundancia como por la bondad del mineral.

También se adjudicaron la Constancia situada en Son Tema y la Perla del Toro, la primera de plomo y la segunda de mineral cobrizo.

El seis de febrero de 1856, fue botada al mar la polacra-barca Frasquita perteneciente a la sociedad de los hermanos Morey dedicados al comercio de Palma de Mallorca. Fue reconstruida con un considerable aumento de sus anteriores dimensiones, trabajo realizado en los talleres del acreditado constructor D. José Tudurí de la Torre.

La polacra-barca, media en la nueva botadura:
Largo de línea de carga. 420 pies ingleses.
Manga 23 ½
Puntal 44

En la misma fecha, la administración de la Sociedad del Vapor Mahonés hacía saber al público en general:
Esta sociedad en comandita ha acordado aumentar su capital hasta la cantidad de cien mil duros, con el objeto de adquirir un segundo vapor de mayores dimensiones para sustituir en su actual carrera al que hoy posee. Deseosos los interesados entre quienes se halla ya repartido el referido aumento de capital, de generalizar una empresa de utilidad publica tan notoria, están dispuestos a ceder alguna parte de su interés, a las personas que gusten asociarse, a cuyo efecto podrán dirigirse hasta el próximo domingo 6 de febrero al despacho del infrascrito gerente o al socio comendatario don Rafael Femenías quienes les enterarán las bases convenidas y les darán cuantas explicaciones deseen.

La fragata Aurelia de los señores Plandolid y compañía del comercio de Barcelona desemboco el estrecho de Gibraltar el 22 de diciembre según un parte del Vigía que publica el Lloyd Epañol.

Una de aquellas mañanas, entraron en Baixamar provenientes de poniente, llegaban del Grau, varios mulos cargados en basts i bases de enormes sarrias repletas de pescado. Aclarar, a cuantos lo ignoren. Eran tiempos en que la Albufera des Grau daba de comer a muchas familias. Muchos también eran los niños que andaban mal viviendo por aquel lugar, trabajando en lo que fuera. Sus padres tenían demasiados hijos a quienes mantener, la cual cosa era más que suficiente con tan solo seis años, los llogaran en fincas.

Amén de los predios, se podía ser útil en la pesca, siempre muy bien visto por el propietario de la finca, señor Mercadal. A principios del siglo XX adquirió una especie de draga, la cual facilitaba ir abriendo las arenas que se iban cerrando con el mal tiempo.

Nuestros mayores, jamás olvidaron las especies que allí se capturaban, desde anguilas, de las cuales se conocían tres clases de variedades entre ellas unas de enormes punyeguerals se las confundía con los " congres" Infinidad de gambas que en la pescadería junto al pescado allí capturado y sacos de almejas se vendían a buen precio.

Para finalizar, añadir que aquella mañana llamó la atención la llegada de las caballerizas, toda vez que el pescado siempre era transportado a pie, se cargaban el cesto en lo alto del cuello y dándole coraje a la oscuridad y a lo desierto del lugar, aquellos niños llegaban a Mahón cruixits, morts i rebentats.

margarita.caules@gmail.com