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El Parlament tramita la aprobación de tres nuevos impuestos, llamados 'verdes´, que afectan a los establecimientos comerciales, a los 'rent a car' y a los envases. Todos los sectores empresariales no solo se han manifestado en contra, sino que están preparando recursos para evitar su aplicación. La oposición a estos impuestos se manifestó con claridad en el pleno del Parlament del pasado 26 de marzo. En este momento, los empresarios se plantean llegar al Tribunal Constitucional, incluso recurrir a instancias europeas por el perjuicio que consideran que crearán las nuevas contribuciones. Las principales organizaciones del sector turístico, las mayores empresas de la distribución y las organizaciones empresariales menorquinas se han manifestado de forma muy crítica contra el proyecto del Govern. Es cierto que se ha aceptado igualar la superficie de los establecimientos comerciales, pero no ahora sino que debe modificarse antes la Ley de Comercio, un compromiso que crea dudas entre los empresarios de la Isla. La originalidad y exclusividad de estas medidas impositivas tampoco ayuda a comprender su aplicación. El Govern debería alcanzar el objetivo del déficit con acciones que no perjudiquen la actividad económica.